Cap. 54

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1000 i'wos después de la caída de Saturno

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1000 i'wos después de la caída de Saturno.

La Tierra. Ciudad de Nyx. 2:30 am.

Ryker va con Cassie al lado izquierdo del salón, y le he pedido que vaya con ella, solo porque sé que Cassie no daría lo mejor de si misma, si estuviera con Thayer o conmigo a su lado, ya que nos ve como escoria saturniana.

Cammie, que sé que es una excelente guerrera ha quedado al final del pasillo donde se ha amontonado una gran cantidad de Sats que jamás había visto llegar. Y Thayer y yo hemos avanzado hacia el escenario, donde esperamos eliminar al comandante y a su línea de soldados que lo protegen, sin antes exigirles el paradero de Kohn o de Celeste.

No me iré de aquí sin respuestas.

-¿estas lista para esto?—vuelve a preguntarme Thayer por segunda vez.

-puedes dejar de ser tan odioso y concentrarte. –respondo, mientras cargo dos pistolas de protones y las apunto en dirección a mis oponentes.

El ríe con intención.

-solo trato de asegurarme que estés centrada. –añade, haciendo aparecer con un movimiento de sus manos, dos enormes cuchillas de plata y energía solar.

La perfecta arma para combatir la oscuridad.

-trata de proteger tu trasero, porque tú eres quien protegerá el mío.

Thayer me guiña un ojo y desaparece en una nube gris oscura. La única señal que necesito para saber que unos cuantos oscuros se encontraran muy pronto de cara con su destino.

Escucho tres disparos seguidos, y luego de esto, tres cuerpos de oscuros caen al suelo, convirtiéndose en nada más que sus esencias.

Thayer está parado en el lugar del crimen con una sonrisa que me invita a que me una en la travesía y yo no pierdo tiempo en hacerlo.

Dos oscuros lo suficientemente valientes se acercan reptando como serpientes hacia mí y me disparan sin pensarlo dos veces, yo me muevo rápido como un chita, y aparezco detrás de ellos sin que lo noten.

-ups...-digo detrás de ellos, quienes se voltean al oír mi voz. –creo que fallaron.

Sus rostros de incredulidad me hacer reír, y no pierdo más tiempo valioso cuando les disparo directamente en la frente al mismo tiempo.

Ellos caen de rodillas y desaparecen en esencia oscura.

Mis manos, que sujetan las manillas y los gatillos de las pistolas hormiguean por la subida de adrenalina, y vuelvo a moverme como un rayo, cada vez más cerca del escenario.

Un grupo de oscuros intentan interceptarme, pero antes de disparar me rodean como si fuera su presa del día. Cuento seis hombres oscuros y dos mujeres oscuras que llevan solo dos cuchillas parecidas a las que ha hecho aparecer Thayer de la nada.

Crónicas Saturnianas I : Híbrida (No Editada) Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ