Sangre, sudor y lágrimas

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[Warning: capítulo +16 ¿? Rollercoaster of emotions]

Una vez todos se fueron del departamento y Namjoon y Seokjin quedaron solos, el lugar se volvió callado súbitamente. En todo el rato que se encargaron de limpiar y guardar, no se miraron ni se dirigieron la palabra.

Ese beso los había dejado totalmente aturdidos y una vez que ya no hubo nada que hacer mas que aclarar las cosas, ninguno de los dos supo que decir.

Aunque Seokjin consideraba que el que debía las explicaciones era su dongsaeng, ante el silencio de otro decidió comenzar él— Nam... lo que sucedió...

—Fue un error— le cortó el menor, sin darle a tiempo de procesar nada o sentirse herido ante esa frialdad—. Eso... no tendría que haber ocurrido. La verdad que no se que estaba pensando. Lo siento, Jin. No quería arruinar nada.

Namjoon estaba totalmente acelerado, ofuscado, movía los brazos tratando de explicarse y eso en cierta manera le parecía tierno a Seokjin. Y se odiaba por pensar que Nam era tierno cuando este le estaba escupiendo en la cara que aquel ansiado beso había sido un error.

—Yo...

—¡No es necesario que digas nada! Esto fue solo mi culpa— el menor, sin darse cuenta, se acercó hasta quedar a solo dos pasos de Seokjin—. Estaba inmerso en lo que estaba contando y de repente...

Y tal como había sucedido mas temprano, nuevamente apenas si cruzaba una brisa entre los dos. Namjoon miró a Seokjin a los ojos y en otro momento se hubiera dado cuenta de lo lleno que se sentía en ese momento, pero su atención se desvió a los carnosos labios de Seokjin.

Los cuales, cual inocente provocación, Seokjin se relamió en un sutil movimiento que despertó aquello mismo que había poseído a Namjoon mas temprano.

En un segundo estaban nuevamente pegados, en un beso apasionado, ahora iniciado por los dos. Namjoon lo fue arrastrando hasta que la espalda de Seokjin chocó contra la pared de la cocina.

El menor levantó los brazos del castaño, sujetándolos con una mano encima de su cabeza mientras mordía sus labios. Estaba maltratándolos de una manera que nunca pensó podría hacer, pero su lívido se había disparado en un santiamén.

El Kim mayor se dejó hacer lo que Namjoon quisiera -no iba a quejarse ni reclamar nada mas tarde, realmente lo necesitaba, al menos una vez-. Cuando los labios y dientes de Namjoon comenzaron a ocuparse de su cuello no reparó en contener sus gemidos de placer, los cuales solo le dieron mas pase libre al menor. Comenzó a moverlo nuevamente, pero esta vez rumbo a la habitación, mientras Seokjin rápidamente le desabrochaba la camisa.

Koya y RJ escucharon un portazo proveniente del cuarto de Namjoon y se miraron entre si, ambos sentados en el sillón de la sala y mirando la televisión juntos.

—¿Crees que eso salga bien? — le preguntó RJ al koala azul, tratando de no ruborizarse demasiado.

—No estoy seguro... pero mejor subámosle el volumen a la tele— propuso Koya ante el asentimiento de su pareja y un suspiro seguido de ambos.

~

—¿Entonces nunca saliste con un hombre? No quiero sonar prejuicioso, pero eres un perfecto maricón, mas que Hoseok incluso.

Jimin le propinó un golpe fuerte a Suga en la cabeza ante sus frontales palabras.

—No recuerdo haberte dado tanta confianza, Min...— le retó mientras se cruzaba de brazos, ofendido.

Chimmy caminaba detrás de ellos con Shooky en su cabeza y, ante la risa del perro amarillo, la galletita lo pateó. Nadie podía burlarse de Jimin, ni siquiera su alma.

Los leales ➳ BT21&BTSWhere stories live. Discover now