Sentidos

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Querido Ron

Si vuelves a preguntarme si Snape en verdad le estaba ofreciendo ayuda a Malfoy, puedes poner tu próxima carta en...

Pues sí, Snape estaba ofreciéndole ayuda, y sí, también es cierto que él dijo, explícitamente, juramento inquebrantable. Y antes de que me mandes una carta explicándomelo, ya sé lo que eso significa.

Pero no entiendo por qué Snape haría un juramento inquebrantable con la madre de Draco para protegerlo, ¿Eso no te dice nada? todo esto es muy extraño, sé que hay algo malo que está por pasar ¿Recuerdas cuando yo era el único capaz de escuchar al basilisco en segundo año? Bueno, ahora parece ser que soy el único en darse cuenta que algo malo está pasando con Malfoy, y no, no lo digo por las flores.

Por eso debía quedarme, quiero decir, lamento no haber ido a la Madriguera y poder reunirme con todos, incluso Remus dijo que iría a visitarlos, pero era lo mejor.

Además, cuando hablé con Dumbledore antes de las vacaciones me aconsejó no salir de la Madriguera, supongo que ahora que no salí de Hogwarts es aún mejor.

¿Crees que deba contarle a Dumbledore lo que escuché? Snape es parte de la orden y lo más seguro es que el profesor piense que está tras Malfoy para saber que trama y no para ayudarle. No entiendo cómo puede confiar tanto en él.

De todas formas, le escribiré a Remus para saber qué opina, creo que también le hablaré sobre el libro del príncipe mestizo, puede que él sepa algo.

Deséales a todos una feliz navidad de mi parte.

Con cariño.

Harry.

Dejó la pluma sobre la mesa y releyó el pergamino. Más tarde tendría que ir a la lechucería para dárselo a Hedwig.

Estaba en la biblioteca, casi no había estudiantes alrededor puesto que aún era temprano. Él no había podido dormir muy bien la noche anterior y estuvo despierto desde que se colaron los primeros rayos de sol entre las cortinas, por eso, en cuanto supo que la biblioteca estaría abierta, se dispuso a escribir una respuesta para la carta que su amigo le había mandado el día anterior contándole cómo fue atosigado por todos, preguntándole una y otra vez por el paradero de Harry y por qué este había decidido quedarse en Hogwarts este año, además, claro, del regaño que se llevó de parte de la señora Weasley por permitir que lo hiciera.

A Harry le agradaba esa atención prestada por parte de los Weasleys, no podía evitar verlos como la única familia que podía recordar, pues con sus tíos y su primo no había tenido precisamente una convivencia que lo ubicara más allá de la posición de sirviente.

Pero ahora los tenía a ellos, todos los pelirrojos estarían juntos en navidad, degustando de la deliciosa comida que preparaba la señora Weasley en estas fechas, con Fred y George haciendo bromas y el resto riendo de vez en cuando...

Por un instante, Harry olvidó el motivo de su estadía en Hogwarts.

Los copos de nieve empezaban a agruparse en una de las ventanas más cercanas, y esa imagen distante lo llevó a la noche en la que decidió no ir a pasar la navidad en La Madriguera, y todo porque, deliberadamente, ofreció su ayuda a Draco Malfoy.

Ah, claro.

—Aghh—su quejido y el sonido hueco de su frente golpeándose con el escritorio produjo un eco profundo.

¿Por qué lo hizo?

Solo podía pensar en la inexpresividad en la cara de Malfoy cuando se lo dijo, y en su siguiente acción que fue irse de la habitación sin más, sin siquiera dedicarle una mirada que le hiciera saber qué es lo que pasaba por su cabeza en ese instante.

Hanahaki Where stories live. Discover now