🌺Diecinueve🌺

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A la noche siguiente, Irupé volvió al lago, a esperar a Laito. Esa noche estaba más pensativa de lo normal, en especial por el cambio de humor de su amigo Kou, que luego de abrazarla le atacó una momento de pánico, y desapareció dejándola confundida.

«¿A qué se referirá Kou con “imposible”?» Pensó Irupé, sentándose en el césped, mirando el lago, para sumergirse en sus pensamientos y recordar la noche anterior.

[...]

— ¡Esto no puede ser! Esa persona tenía razón. ¿Pero cómo pasó? ¡Eso es imposible! — habló Kou, dejando de abrazar a Irupé, y caminar de un lado a otro, en la habitación de la mencionada.

—¿Kou-kun estas bien? — preguntó Irupé preocupada.

— Si...Mneko~chan solo que... Es imposible que sienta esto...aunque se siente muy bien, pero es imposible....imposible. — Exclamó Kou, para desaparecer del campo de visión de la joven.

— ¿Ah? ¿Kou-kun? Pero....ahora ¿qué bicho le picó? — se preguntó Irupé, confundida.

[....]

La rubia no entendía el comportamiento del Mukami, había actuado de forma paranoica de repente, asustándola aparte de confundirla.

Ella deseaba hablar con Kou, para preguntarle qué le había pasado, pero sabía que eso era imposible, aunque quisiera buscarlo al campamento, ella no tenía ni la menor idea dónde se encontraba.

— ¡Bitch~chan! — saludó una voz chillona, sobresaltándo a la rubia.

Ella volteó para ver quién la saludaba, aunque ya supiera la respuesta.

— ¡Laito-kun! — saludó Irupé, con el mismo tono.

— ¡Hola! Adivina lo que te traje. — Exclamó Laito, con una sonrisa de oreja a oreja, manteniendo las manos atrás de su espalda.

Irupé trato de ver atrás del castaño, pero él no se lo permitió. Hizo una mueca pensativa, encogiéndose de hombros para luego sonreír.

— No lo sé. ¿Qué es? — preguntó con un tono de curiosidad.

— ¡Adivina bitch~chan! ¿O me dirás qué no sabes lo que es una adivinanza? — exclamó Laito, cambiando su expresión a una burlona.

Ella frunció el ceño, cruzándose de brazos.

— ¡Claro que se lo que es una adivinanza! Pero....no tengo ni idea de lo que tu mente puede pensar. — Respondió Irupé, con sinceridad.

— Solo inténtalo bitch~chan. — Insistió Laito.

La chica suspiró, para tocarse el mentón pensativa.

— Mmmm.....¿Un libro? ¿Flores? ¿Comida? — preguntó la joven, alzando una ceja.

— ¡Nop! Algo mucho pero mucho mejor, un vestido. — Canturreó el castaño, para dejar ver sus manos ocupadas con un vestido largo, de color negro.

Ella tomó el vestido en sus manos, con una expresión de asombro, agarró el vestido desde las mangas alzándome al aire para ver como caían los volados del vestido, que estaba adornado con rosas blancas en el escote, y un cinturón de cadena dorada con flores azules atado en su cintura. Acompañado de un guante negro en el brazo izquierdo que llegaba hasta el antebrazo con una red.

Flor Cautiva ||Laito Sakamaki - Diabolik Lovers|| Libro №1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora