~Capitulo 11~

105 9 3
                                    

— No hay nada entre él y yo. –Respondí tajante.– Además, no deberías ponerle atención a esas cosas sin importancia.

— Marlyn... –susurra– ten mucho cuidado...

Fueron sus últimas palabras para marcharse a dormir y dejarme con la palabra en la boca...

•••

La mansión parecía un lugar espeluznante en las noches puesto que la luz era poca. Había dado un largo recorrido por todo el lugar que ya había olvidado el camino de regreso a mi habitación o sala principal.

— Rayos.. ¿dónde estará la salida..?

Traté de retroceder mis pasos pero me fué imposible, habían muchos pasillos y caminos que tomar como si fuese una especie de laberinto, ¿qué es esto un castillo?. Y sin darme cuenta, me encontré en un lugar que no había visto antes... Había llegado hasta una puerta doble de madera el cual se encontraba semi abierta. Entonces, la curiosidad me invadió por completo, ¿qué habrá ahí dentro? Me dije. Tan sólo dí unos pasos para tomar el picaporte y tirar con lentitud hacía mí cuando...:

— ¡¿Qué estás haciendo?!. –La voz de Maryeré fué suficiente para apartarme de la puerta con rapidez por su presencia.– ¡Niña no deberías de estar aquí!. –Se aproxima a mí y me toma de la mano.– Será mejor irnos de aquí antes de que el señor venga.

— ¿Señor...?, ¿te refieres a Manuel..?, ¿¿por qué...??, ¿¿¿qué hay detrás de esa puerta???.

Era obvio que estaba intrigada por cómo me a dicho de una manera cómo si el saber o no lo que se esconde ahí dependiera de su vida. Pero, ¿por qué...?.

A medida que nos alejabamos, hice memoria del camino por si otro día volviese a perderme, o más bien, a "no volver a toparme con dicha puerta."

Finalmente llegamos a mi habitación y en lo que entro Maryere me advierte sobre no volver a salir sola.

— Lamento lo que hice pero estaba perdida y no sabía dónde estaba. –Traté de explicarle–

— Y con más razón debes avisarme, te estuve buscando por horas niña, no vuelvas asustarme así ¿entendiste?.

— Perdón... Buenas noches.

Con eso fué suficiente para que se marchara no sin antes echarle llave a la puerta.

— Gracias por la confianza. –Le dije a la nada sarcásticamente.–

Aveces me preguntaba si existían más personal a parte de Maryere, es la única a quién e visto y conocido en esta mansión.

•••

En algún lugar de la ciudad, Belmont.

— Retiren estos cuerpos de aquí antes de que alguien los vea. –Manda un hombre de traje negro.–

— Nathaniel yo me ocuparé de estos cuerpos, tú ve a ver cómo sigue Belly, según me han dicho que está hecha una fiera. –Decía mi compañero–  

— De acuerdo.

Me aproximo hacía un callejón solitario hasta llegar a una puerta el cual era como un escondite secreto donde Belly, yo y otros hombres permanecemos escondidos.

Al entrar, diviso entre los sujetos que permanecían fumando, otros jugando apuestas, hasta que al fin la encuentro con la mirada, y por lo que veía, se estaba desquintando con una mujer dándole una paliza. 

Me aproximo lo suficiente como para contemplar mejor la escena.

— ¡Por favor perdóname...!, ¡Juro que no fué mi intención...!

~CHAT DESCONOCIDO~Where stories live. Discover now