~Capitulo 17~

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"Nadie se salvará de ésta pesadilla, todos morirán aunque lo intenten..."

— Toma asiento. Ahora quiero saber qué es lo que tienes que decir.

— Yo.. – "¿Por qué dudas ahora?"– quería decirle que perdimos el rastro del hermano de Marlyn. No pudimos encontrarlo.

— ¿Esperaste tanto para decirme que no cumplieron con su misión.? –dije con molestia.–

— Lo lamento... –baja la mirada–

Aunque me decepciona su incumplimiento, me hace gracia ver su cara tan fingida y nerviosa.

— Estoy decepcionado, lo que les pedí fué algo tan sencillo, y ustedes dos no pudieron con el trabajo.

Belly

Ver su expresión de desapruebo y enojo provocaba que mis nervios despertaran y recorrieran por todo mi ser.

Deberías matarlos, es lo menos que se merecen.–dice la voz de aquél hombre que se encontraba entre la penumbra de la habitación con tan poca luz.–

Había olvidado su presencia, sin embargo, no podía verle con claridad el rostro puesto que estaba en un rincón sentado sobre una silla a oscuras, parecía ser el espectador anónimo que analizaba con inquietud y en silencio la situación. ¿Quién demonios era ese?. Por otro lado, sus palabras me desconcertaban. 

— Tienes razón. –Le contesta Juan– pero no lo haré aún.

Quién sea que fuese, piensa igual que él, tal vez sea su cómplice quién le ayudó a formar todo este plan siniestro.

— Te noto extraña Belly, no has tomado un sorbo de café desde que Maryere te lo entregó, supongo que a de estar frío.

— No tengo ganas de tomar.

— Entonces permíteme.

Él se levanta de su asiento y toma la taza que traía conmigo,  cuando creí que las cosas no irían a peor, este soltó una carcajada. ¿Qué rayos le sucede? ¿está drogado o qué?.

— Eres una estúpida... – entre risas–

"En verdad este tipo está drogado."

Y cuando creí que estaba a punto de enloquecer, estampó la taza contra el suelo inesperadamente tensando aún más la situación y ambiente.

Eres una imbécil. –Toma de mi cabello y me levanta con brusquedad.– ¿Me viste la cara de idiota o qué?, ¿Creíste que no me iba a enterar de su plan?.

— Siempre tendrás la cara de idiota...

Con eso bastó para lanzarme contra el escritorio. El dolor se presentó de inmediato por todo mi cuerpo, ¿qué había dicho..?.

Hice el esfuerzo por levantarme, pero él de acerca y me toma del cuello con la intención de asesinarme, era obvio que lo había hecho enfurecer.

Tu pequeña traición será compensada con tu muerte.

— ¡Vete, al demonio...! –Lo pateo en la entrepierna y salgo de la habitación–  ¡¡NATHANIEL TENEMOS QUE SALIR DE AQUÍ AHORA!! –acercandome a él–

— ¿¿Qué ha sucedido ahí dentro??.

— ¡Juan lo sabe todo!, ¡tenemos que largarnos!. –dije con desespero–

— ¿¿Qué??, ¿¿¡Pero cómo ese imbécil se enteró!??.

— ¡NO LO SÉ PERO VÁMONOS DE AQUÍ AHORA!.

Lo tomé de un brazo y lo obligue a seguirme hasta la salida, pero mis intentos de irnos fueron en vano tras soltarse de mi agarre.

— No me voy a ir. –Con firmeza– Sara sigue aquí al igual que los otros, no los vamos abandonar ahora.

— ¡Nathaniel!.

— ¡No Belly!.

Iba agregar algo más cuando veo detrás de él a Juan mirándonos con odio y enojo.

De aquí no salen con vida. –Escupe con desprecio–

— ¡Eso está por verse!. –Tomo a Nathaniel y corrimos hacía los pasillos–

Será mejor que vayas a por Sara.

Tienes razón. –Se marcha–

•••

Abrí la puerta lentamente y para mi sorpresa, el lugar estaba totalmente oscuro, busqué a ciegas el interruptor que haría encender las luces y al hacerlo, mi expresión cambió por completo, se trataba de una habitación con luces rojas, miles de fotos pegadas en las paredes, periódicos viejos y papeles regados por todo el suelo, "¡¿Qué rayos pasa aquí?!", Tal parecía que Juan le gustaba bastante coleccionar víctimas, ~¡Es un enfermo!~ Dice mi consciencia. "Lo sé, ¡este tipo está demente!" Me dije.

Pero ahí no acababan las sorpresas, mientras más me adentraba a lo que podría ser un cuarto para enfermizos cómo él, supuse que los periódicos y papeles se trataban de todas esas desapariciones de los cuales la policía jamás pudo hallar.  Sin embargo, mi mirada se fijó en la mancha de sangre sobre un tapete blanco. Me acerqué un poco para examinarlo y toqué con las yemas de  mis dedos la sangre.

— Está seca y oscura, supongo que debió pasar mucho tiempo cuando se presentó. 

De pronto, sentí un poco de frío recorrer por todo mi cuerpo, estaba segura de que no había aire acondicionado en este lugar, hasta que me doy cuenta de que había otra puerta a mi izquierda, pero esta se veía diferente, era más ancha, hecha de hierro y blindada de aluminio con una válvula en el centro.

"¿qué rayos es eso?" Me pregunté, me acerqué, tomé con ambas manos el volante y lo giré.

•••

Corrimos con toda la velocidad que teníamos tomando rumbos al azar sin saber adónde nos llevarían, no podíamos darle el gusto de atraparnos.

"No te preocupes Sara, te encontraremos y saldremos de esta."

¡Belly cuidado!. –Advierte Nathan–

Pero para cuando me dí cuenta, habíamos chocado con alguien.

— ¡Oigan podrían...! –su voz calló al reconocernos.– ¡Belly, Nathaniel!

— ¿Marlyn?, Que gusto nos da encontrarte –Dije con alegría– ¿la encontraste?.

— No.

— Es difícil hallarla con tantos pasillos. –habla Nathaniel.–

— Marlyn tenemos un problema, Juan ya lo sabe todo, nos queda poco tiempo.

•••

Abrí la puerta dejando ver con claridad una cámara frigorífica. Nunca imaginé que habría algo así en este lugar, hacía mucho frío para mí gusto; y cuando creí que solamente se almacenaba carne o frutos, este en tenía otra cosa. 

— Oh por Dios... –Cubrí mis boca con ambas manos de la impresión.–

¿Te gusta?.

Lo oí detrás de mí.

~CHAT DESCONOCIDO~Where stories live. Discover now