*El ladrón*

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Abrí los ojos y quedé deslumbrada por el verde y dorado, no tenía ni idea de lo que había sucedido, solo sabía que yacía en lo que parecían hojas y ramitas.

Luchando por llevar aire a unos pulmones que parecían aplastados, parpadeé y me di cuenta de que la luz deslumbrante de colores chillones era la claridad del sol, que se colaba a través de un dosel de hojas a mucha altura sobre mi.

Me apoyé en las manos y me puse de rodillas, preparada para enfrentarme a una criatura pequeña y feroz, pero vi que el objeto era el pie de Ron.

Mirando alrededor observé que los cuatro estábamos solos en el bosque extenso.

Mi primer pensamiento fue que era el Bosque Prohibido, y por un momento, incluso sabiendo lo tonto y peligroso que sería que Aparecerse en los terrenos de Hogwarts, mi corazón dio un salto al pensar en escabullirme entre los árboles hacia la cabaña de Hagrid.

Sin embargo, en los pocos momentos que le llevó a Ron emitir un gruñido bajo y a mi empezar a gatear hacia él, me di cuenta de que éste no era el Bosque Prohibido.

Los árboles parecían más jóvenes, había espacios más amplios y el terreno era más claro.

Me encontré con Harry y con Hermione, también apoyados sobre las manos y rodillas, junto a la cabeza de Ron.

En el momento que mis ojos se posaron sobre Ron, todas las otras preocupaciones volaron de mi mente, ya que la sangre empapaba por completo el lateral izquierdo de Ron y su cara de color blanco grisáceo, destacaba sobre el suelo lleno de hojas.

La poción multijugos ahora estaba desapareciendo.

Ron estaba a medio camino entre su apariencia normal y la de Cattermole, su pelo se volvía más y más pelirrojo mientras su cara perdía el poco color que le quedaba.

-¿Qué le ha pasado?- susurré con mucha preocupación.

-Se escindió.- dijo Hermione, con los dedos ya ocupados en la manga de Ron, donde la sangre era más abundante y oscura.

Miré, horrorizada, como abría con violencia la camisa de Ron.

Siempre había pensado que escindirse era algo cómico, pero esto... mis tripas se revolvieron con desagrado cuando Hermione descubrió el antebrazo de Ron, donde faltaba un gran pedazo de carne, sacada limpiamente como si se hubiera usado un cuchillo.

-Harry, rápido, en mi bolso hay una pequeña botella con la etiqueta 'Esencia de Díctamo..."- ordenó Hermione.

-El bolso... sí...- Harry se apuró hacia el lugar donde había aterrizado Hermione, agarró el pequeño bolso adornado con cuentas y metió la mano en el interior.

Por su rostro, estaba encontrando de todo menos la esencia de Díctamo.

Agarró su varita del suelo y la apuntó a las profundidades del bolso mágico.

-¡Accio Díctamo!- agarré mi varita del suelo y la apunté a las profundidades del bolso mágico.

Una pequeña botella marrón salió zumbando del bolso, la cogí y volví con rapidez junto a Hermione y Ron, cuyos ojos ahora estaban medio cerrados.

Todo lo que se veía entre sus pestañas eran franjas del blanco globo ocular.

-Se ha desmayado.- dijo Hermione, que también estaba bastante pálida.

Ya no parecía Mafalda, aunque su pelo todavía estaba gris en algunas partes...

-Destápala en mi lugar, me tiemblan las manos.- me pidió Hermione.

La Hermana de Ron Weasley (Draco Malfoy y tú) //7//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora