Otro mundo

06. El despertar de una reina.

-Mi nombre es Aurora Pendragon y soy la reina y soberana de todo Camelot.-Declaró con orgullo.

Esas palabras los dejo desconcertados. Sin saber que decir o hacer.

Arturo no se veía capaz de pronunciar palabra alguna. El asimilar los hechos que estaban ocurriendo delante de él eran demasiado.

Sir León fue el único en poder salir de el estado en que los había dejado lo que dijo la joven.

-Disculpe, creo haber escuchado mal ¿Reina de donde dice usted?- Cuestiono conservando un tono amable para no alterarla, ya que la supuesta reina había mostrado un claro conocimiento de como empuñar una espada.

-De Camelot.-Respondió Aurora mientras volvía a el lado de su fiel sierva, agachándose para estar más cerca de ella.

-Fui herida en batalla. Merlia se encargo de cuidarme.- Explicó acariciando la mejilla de la joven que aun no mostraba indició de despertar pronto.

-Estoy segura que hubiera muerto de no ser por ella...-Dijo para lo luego pestañear y negar levemente con la cabeza para después comenzar a levantarse. - Y Merlín, claro esta. No tienen que preocuparse por su magia, él--- -Se interrumpió quedando sorprendida por lo que sus ojos veían.

-Sus capaz- Señalo en forma de susurro.

Quedando sin palabras a el ver el muy conocido rojo que distinguía a Camelot de los demás reinos.

-¿Quienes son ustedes?- Pregunto la reina.

El único pensamiento que se formo es la mente de los caballeros fue que la joven había enloquecido por todo lo que decía.

Sir León volviendo a tomar la iniciativa, dio un paso adelante y hablo:

-Somos caballeros de Camelot, y él - Señalo con su mano a el rubio que estaba a su lado izquierdo.- es Arturo Pendragon.-

-Rey de Camelot.- Tomo la palabra el joven soberano, dando un paso a delante.

Aurora se quedo mirando perpleja a el rubio que acaba de acercarse, por un momento, hasta que se largo a reír.

Todos se quedaron mirándola con extrañes a ente tal acto.

-¿Ustedes? ¿Caballeros?- Dijo intentando controlar su risa.-Por favor, no hay hombres de caballería en Camelot. - Aseguro.

Arturo como los otros se quedaron en su lugar viendo como la supuesta reina reía hasta casi llorar.

¿Hombres de caballería?
Se pregunto Arturo mirándola confundido.

- ¿Esto es una clase de broma?- Cuestión Aurora terminando con su risa.

El rey que comenzaba a desconfiar cada vez mas de la rubia, dijo serio.

-Te puedo asegurar que no es ninguna broma.-

La reina lo cuestiono con la mirada, quedando sorprendida en el instante que la poca luz del día le mostraba lo parecido que este supuesto Arturo era a su padre.

Pero en el momento que el joven frente a ella volvió a hablar, el anterior pensamiento quedo sin importancia alguna.

- No se si te has golpeado fuerte la cabeza o algo pero todo lo que estas diciendo son locuras.-

Aurora se sentía ofendida, nadie más que Merlia le hablaba así y de cierta forma, era la única que podía hacerlo.

-Bien, mira- Comenzó molesta la joven. - acabo de estar a punto de morir, además de descubrir que la que fue y es mi dama de compañía, por ya más de cuatro años posee magia. No estoy realmente para esta clase de juegos ¿si?-