Moon & Bouquet •Michaeng G!P•

Capítulo 11

— Hola, bro.

Chaeyoung quedó en shock al ver a una de sus mejores amigas, Yoo Jeongyeon, frente a ella, afuera de su casa con los ojos hinchados y sus mejillas mojadas por lágrimas.

— Dios mío, Jeong. ¿Estás ebria?

La mayor negó con la cabeza.

— No, solo corrí demasiado. ¿Puedo pasar? ¿O interrumpo algo?

La más baja apretó sus labios, estaba entre ir a dar una vuelta con Jeongyeon y así no interrumpir la cena, o hacerle unas señas a Mina para que entendiera que pasaría a la habitación. Optó por la segunda opción, aprovechando que el pasillo hacia las escaleras de la habitación no conecta con el living.

— Pasa, adelante. -Chaeyoung se colocó hacia un lado para dar el paso a Jeongyeon.- Ahora mismo están los padres de Mina, pero en unas horas se irán.

Jeongyeon entró lentamente y esperó a que su amiga empezara a caminar para luego seguirla. Vio a Chaeyoung asomándose en el comedor haciéndole leves señas a Mina para que se acercase, la japonesa luego apareció en la escena y se sorprendió al ver a Jeongyeon de pie en el pasillo. Ambas se saludaron levemente con la mano, Chaeyoung le susurró algo a su pareja y esta asintió. La coreana más baja le hizo señas a Jeongyeon para que la siguiera hasta la habitación. Una vez dentro, Jeongyeon suspiró.

— Tú y Mina se ven bien. -Habló Jeongyeon.-

— Aún discutimos un poco, pero no tanto como antes. Estamos trabajando en eso...

— Él...¿Aún molesta? -Preguntó con cautela.-

— ¿Vernon? -Jeongyeon asintió en respuesta.- No me he topado con él y espero no hacerlo nunca más. Trabaja con Mina, pero no le habla para otras cosas que no sean trabajo. -Chaeyoung suspiró.- ¿Ocurrió algo? -Preguntó preocupada por su amiga.-

La rubia de cabello corto bajó la cabeza y suspiró, tratando de no volver a llorar.

— Nayeon volvió con él.

— ¿Con él...? -Murmuró Chaeyoung confundida para luego abrir sus ojos anonadada.- ¡¿Con Jinyoung?!

Jeongyeon asintió.

Nayeon y Jinyoung habían terminado su relación que tenían desde la escuela, pero la terminaron porque Nayeon estaba cansada de que su relación fuera monótona. En ese tiempo, Im se refugió en Jeongyeon, de vez en cuando ambas tenían breves encuentros pero era nada más para auto satisfacción de la mayor, ya que, según ella, Jeongyeon siempre ha sido su mejor amiga. Sin saber los sentimientos de Yoo que están entre medio.

— Sabes que ella es hetero Jeong, no lo vale. Las veces que te ha besado y quizás intentado otra cosa es porque estaba un poco pasada de copas. -Dijo acercándose para abrazarla.-

Jeongyeon bajó la cabeza y la apoyó en el hombro de su mejor amiga.

— Todas esas veces que me besó, que me tocó...esos "te amo"... -Jeongyeon empezó a sentir el nudo en la garganta.- Ella sabe lo que siento por ella, y aún así tiene la personalidad de decírmelo en la cara antes de besarnos...Se supone que a veces la gente ebria dice la verdad, ¿No? -En ese momento las lágrimas ya corrían por las mejillas de Jeongyeon.- Entonces, ¿P-Por qué no siento que haya dicho la verdad todas las veces que me dijo esas cosas?

Después de esas palabras Jeongyeon se rompió por completo. Chaeyoung suspiró tristemente y la abrazó para consolarla, acariciando su espalda levemente, sintiendo como su hombro se humedecía por las lágrimas contrarias.

Luego de unos minutos Jeongyeon se quedó dormida al estar agotada física y mentalmente, oportunidad que Chaeyoung aprovechó para dejarla sola y volver a la cena.

Una vez de vuelta, los padres de Mina preguntaron si algo grave había ocurrido pero Chaeyoung los tranquilizó, diciendo que todo estaba bajo control. La Myoui menor conectó miradas con su pareja y esta tan solo frunció sus labios en señal de que la situación era preocupante.

— Bueno Chaeyoungie, espero que nos sentemos a beber un día de estos que vayas a casa. -Dijo Akira caminando hacia la salida con sus cosas.-

— Espero lo mismo, aunque ojalá que esta vez no sea solamente cerveza. -contestó la menor.-

— Ustedes dos deben dejar de beber demasiado. -Regañó Sachiko.-

— Tengo un ron guardado en casa, cuando vengas lo estrenamos. -El hombre ignoró a su mujer y siguió hablándole a Chaeyoung.-

— ¡Papá deja de incitarla a beber! -Se quejó Mina.- ¡Y tú deja de beber si no quieres quedarte así de pequeña! -Miró a Chaeyoung y esta abrió sus ojos. Los padres de Mina rieron ante la reacción de la coreana.-

— Chicas, el apartamento se ve un poco vacío, sería bonito que alguien más viva aquí. -Habló Sachiko mirando a su alrededor, tratando de no ser muy directa.-

— ¿Quieren venir a vivir con nosotras? -Preguntó Mina confundida, ladeando su cabeza de forma adorable.-

— No, cariño. Ya sabes, pasitos pequeños por las escaleras...

— Ray se estresaría un poco viviendo aquí. -Mina parpadeó al ver a su madre suspirar con fuerza.-

— ¿Debería traer al gato de Yeji? -Preguntó Chaeyoung también confundida.-

— ¿Han pensado en tener un hijo? -Soltó la mujer.-

Esa pregunta le cayó como balde de agua fría a la pareja, en especial a la coreana. Mina frunció el ceño confundida mientras la mirada de Chaeyoung se volvía levemente triste.

— Ambas son hermosas, tendrían un bebé muy bonito y adorable.

Chaeyoung dio un paso hacia atrás mordiendo su labio inferior nerviosa.

— Iré a ver a mi amiga, con permiso. -La menor se excusó y salió hacia su habitación.-

Mina la miró con tristeza y bajó su mirada.

— No queremos hablar de eso ahora. -Sonrió Mina con tristeza.-

Luego de que la familia de Mina se fuera, la japonesa subió a su habitación y vio a Chaeyoung sentada a un lado de una dormida Jeongyeon. Su pareja acariciaba suavemente el cabello de su amiga. Una sonrisa apareció en su rostro, pero se esfumó al recordar la pregunta de su madre. Nunca se había planteado tener un bebé con Chaeyoung, ella encantada, pero el problema era otro.

La coreana se dio cuenta de la presencia de Mina y le sonrió, para acercarse y salir al pasillo cerrando la puerta tras ella.

— ¿Te has molestado por la pregunta de mi madre?

Chaeyoung negó.

— No, solo me puse un poco triste. Ya sabes...

— Te entiendo, mi amor. -Mina colocó la palma de su mano en la mejilla de Chaeyoung, quien cerró sus ojos ante el tacto.-

— De verdad me gustaría que tuviéramos un hijo, pero ya sabes, yo...-Chaeyoung bajó la mirada con la mirada brillante por las lágrimas que empezaban a acumularse.-

— Lo sé, no es tu culpa. Quizás más adelante llegará el momento. Ya sabes, empezar un tratamiento en un futuro. -Mina se acercó y besó a Chaeyoung en los labios.- Vamos a dormir, hay trabajo mañana.

Ambas caminaron tomadas de las manos hacia la habitación para luego recostarse y dormir. O eso intentó Chaeyoung.