Preámbulo 2: La vida en la academia

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Tras la conversación que habían mantenido aclarando su situación, las cosas habían ido volviendo poco a poco a la normalidad. Al principio les había costado recuperar la naturalidad cuando estaban delante de las cámaras, ya que desde los gritos que se habían empezado a intensificar a raíz de su actuación de Toxic, les quedaba claro que la gente las estaba shippeando y les preocupaba estar siendo demasiado obvias con su comportamiento. Ese pensamiento hizo que a veces se cortasen y que incluso sus miradas cuando estaban juntas se desviaran sin quererlo hacia las cámaras. Sin embargo, con el paso de los días  consiguieron dejar a un lado esa presión y recuperar la normalidad que se había instaurado entre ellas desde que se conocieron. Al fin y al cabo, por mucho que pensaran y quisieran ser discretas, no les salía otra manera de tratarse que no fuera la que tenían: se buscaban, pasaban el tiempo juntas, estaban pendientes de la otra, se hacían reír, se apoyaban... 

Aunque no habían hablado directamente con ellos sobre la situación que estaban viviendo, sus compañeros se habían ido dado cuenta de que algo pasaba entre Natalia y Alba. No sabían qué tenían exactamente, pero la forma que tenían de mirarse y el comportamiento que tenían la una con la otra era claramente distinta a la que tenían con cualquiera de ellos.  Por eso se había creado de manera espontánea, sin necesidad de haberse puesto de acuerdo, una especie de "pacto de protección" entre ellos: todos conocían de la existencia del novio de Natalia esperándola fuera, pero todos evitaban por todos los medios mencionarle, ya que intuían que ese tema podría ser incómodo para las chicas. 

Para Alba no había pasado desapercibido el comportamiento de sus compañeros, sintiéndose muy afortunada por ese cariño que les demostraban sus compañeros, su nueva familia, protegiéndolas sin preguntas y sin pedir explicaciones de ningún tipo. Sin embargo, esos días no importaba que nadie en aquella academia hiciese referencia a su realidad en el exterior, ya que era la propia ilicitana la que no dejaba de darle vueltas a la cabeza desde que habían sabido que saldrían a hacer unas firmas de discos, pudiendo encontrarse con sus familiares en el exterior. La noticia había alegrado sobremanera a Alba pensando en que por fin podría ver a su hermana, a su madre y su padre, pero por otro lado no dejaba de hacerse preguntas que la estaban volviendo loca. "¿Iría su ex a las firmas buscando alguna explicación?" "¿Se encontraría Natalia con su novio?" "¿Cómo iba a afectar eso a la relación que tenían ellas?" "¿Cambiaría Natalia su manera de tratarla después de las firmas?".

La noche anterior a las firmas todos estaban más alterados que de costumbre, pues se morían de ganas y al mismo tiempo les podían los nervios de no saber qué se encontrarían exactamente cuando estuvieran fuera, ya que ellos no tenían manera de saber la repercusión que estaría teniendo el programa. Una vez acomodados en la habitación, y a pesar de que Noemí les había avisado de que muchos de ellos deberían madrugar para poder llegar a la hora de la firma, todos hablaban entusiasmados, habiendo formado un corrillo en dos de las camas. Todos menos Alba, que parecía demasiado callada para ser ella, algo que no pasó desapercibido para Natalia. Cuando la ilicitana se despidió de sus compañeros para irse a la cama alegando estar cansada, Natalia imaginó que había algo que no iba bien, por lo que dejó a sus compañeros de bromas y se fue junto a ella.

N: ¿Ey, qué te pasa? -Preguntó abrazándola de pie, después de conseguir que se girara tras quitar la ropa que había sobre su cama-.

A: Nada, que estoy cansada -Contestó apoyándose en el hombro de Nat mientras contestaba las caricias que estaba recibiendo por parte de la navarra, imitándolas en su espalda-. 

N: Sí, pero me parece que te pasa algo más.

A: Estoy nerviosa por las firma de mañana, la verdad.

N: Va a estar todo genial y seguro que la gente va a ser super maja, Albi.

A: No es precisamente la gente lo que me preocupa -Susurró, soltándose del abrazo y girándose para tumbarse en la cama, viendo como Nat hacía lo mismo a su lado-.

N: Te preocupa lo que podamos encontrarnos nosotras al salir, ¿no? -Dijo intuyendo por dónde iban los tiros, porque ella también lo había pensado-.

A: Sí. Es que no sé qué está pasando fuera, y no sé qué esperar de mañana, sinceramente. -Confesó en un susurro, jugando con un hilo suelto que había encontrado en la cama-. Me da miedo que pueda cambiar algo entre nosotras, ¿sabes?

N: Ya, te entiendo. Yo también he estado dándole vueltas a la cabeza pensando en eso, pero sea lo que sea lo que nos encontremos mañana, entre nosotras no va a cambiar nada, Albi. -Dijo mirándola a los ojos mientras acariciaba su mano-. Cambiar algo en nuestra relación sería como decir que nos arrepentimos de algo, y yo no se tú, pero yo no me arrepiento de nada de lo que he hecho o he dicho porque no creo que estemos haciendo nada malo.

Alba notó la inseguridad en sus palabras y se apresuró a apretar su mano. Igual que a ella le atormentaba la existencia de Mikel, sabía perfectamente que Natalia se había sentido insegura debido a la existencia de su ex y de esa conversación que ambos tenían aun pendiente.

A: Ey, yo tampoco me arrepiento de nada, ¿vale? -Afirmó mirándola fijamente a los ojos para que viera que lo decía completamente enserio, logrando una sonrisa en la morena que logró tranquilizarla-.

N: Jo, te voy a echar de menos mañana -Dijo con voz de niña pequeña abrazándose a la ilicitana, que se moría de ternura cada vez que esa persona tan fuerte en apariencia se convertía en una niña que no pasaba de los 3 años de edad-.

A: Yo también Nat. -Contestó dándole un beso en la mejilla -. Ojalá nos hubiera tocado a las dos juntas.

N: Joder, ya ves tio. Hubiese estado guapísimo vivirlo contigo.

Tras un rato más en los que se dedicaron abrazarse y a bromear para aliviar los nervios que sentían por lo que tendrían que vivir al día siguiente, finalmente decidieron que iba siendo hora de irse a dormir para tener energías al día siguiente y no parecer zombies.


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