Aterrizando

300 5 0
                                    

Una vez finalizado el concurso, llegaba el momento de hacerle frente a la realidad. Estaban en plenas navidades y era el momento para que todos volvieran a casa por unos días y se reencontraran con sus familiares y amigos mientras terminaban de asimilar la experiencia que habían vivido y volvían a acostumbrarse a eso de vivir fuera de la academia, de pisar la calle cuando querían, dormir solos...

Natalia se había ido a Pamplona junto a su familia mientras que Alba había puesto rumbo hacia hacia su tierra natal para estar junto a su familia y sus amigos de siempre. Ambas permanecían en contacto permanente a través del móvil, pero todavía no habían tenido tiempo de hablar sobre su situación. Ambas habían considerado que lo mejor por el momento era disfrutar de sus familias, y después ya tendrían tiempo para hablar de lo suyo. 

Desde el momento que puso un pie en Pamplona Natalia tenía muy claro que había llegado el momento de ver a Mikel y afrontar con él la conversación que tenían pendiente, pero por muchas veces que la había visualizado en su mente, no dejaba de ser un momento realmente complicado para ella. Por eso se había resistido a afrontarlo, excusándose en que primero tenía que pasar unos días con su familia. Pero aquella tarde, tras una conversación con su hermana Elena, decidió no retrasar más lo que era inevitable y le envió un WhatsApp para quedar al día siguiente. Una vez concretada la hora y el lugar de encuentro, Natalia le escribió a Alba.

N: Acabo de quedar con Mikel mañana para hablar con él.

A: ¿Y qué tal estás?

N: No sé, nerviosa, la verdad.

A: ¿Pero estás segura?

N: Claro Alba, tengo muy claro que tengo que hablar con él y que nuestra relación ya no tiene sentido. Ni lo dudes.

A: No dudo baby. Solo quiero asegurarme de que estás bien. Igual son demasiadas cosas de pronto y no pasa nada si te tomas unos días más.

N: No. Lo mejor es aclarar la situación cuanto antes y poder explicarle las cosas personalmente.

A: Bueno. Seguro que todo sale bien Nat. Sabes que me tienes aquí para lo que necesites, ¿vale?

N: Lo sé rubia. Muchas gracias.

El día siguiente llegó, y por mucho que lo había intentado, no había sido capaz de encontrar las palabras adecuadas, por lo que decidió que lo mejor sería no preparar nada y dejar que la conversación fluyera de manera natural. Se vieron cerca de un conocido centro comercial de Pamplona, donde habían decidido ir a tomar algo y comprar algunas cosas. Mikel la saludó con un pico que Natalia no rechazó, aunque tampoco profundizó. Mientras se ponían en marcha empezaron una conversación agradable para ponerse al día. Por encima de todo, siempre habían sido grandes amigos y se conocían muy bien, por lo que sentados en la terraza de un bar Mikel notó que Natalia estaba intentando encontrar la manera de decirle algo sin éxito, por lo que decidió ponerle las cosas algo más fáciles.

M: Lo que quieres decirme es que nuestra relación se ha terminado, ¿no es así? -Preguntó con una expresión tranquila en su rostro-.

N: Mikel, yo... -La morena no encontraba las palabras. Al fin y al cabo, Mikel era alguien importante para ella y le mataba la idea de poder hacerle daño con lo que tenía que decirle-. Mira, estos tres meses me han servido para pensar mucho y para darme cuenta de algunas cosas, y... yo te quiero mucho, eres muy importante para mí y lo sabes...

M: ¿Pero?

N: Pero no te quiero como a una pareja, sino como a uno de mis mejores amigos. -Dijo sincera, buscando la mirada del chico-.  Mikel, tú sabes que antes de irme discutíamos bastante, que no terminábamos de entendernos y...

M: Pero todas las parejas discuten, y al final siempre lo resolvíamos. -Dijo cortándola-.

N: Mira Mikel, tú y yo siempre nos hemos llevado genial, has estado apoyándome en muchos momentos importantes de mi vida, y te aseguro que te estaré siempre agradecida por eso, de verdad, pero no puedo engañarte y decirte que todo es como antes y que seremos muy felices cuando no es cierto. Y creo que en el fondo, si te paras a pensarlo, tú también te darás cuenta de que siempre hemos sido más amigos que otra cosa. -Expuso agarrándole la mano y buscando el contacto con sus ojos-.

M: Sé que nuestra relación siempre ha sido un tanto especial y que sobre todo los últimos meses fueron un poco desastre, pero si te soy sincero siempre he tenido la esperanza de que las cosas se resolviesen y mejoraran entre nosotros. -Confesó con una sonrisa triste-.

N: Yo... De verdad que me encantaría poder decirte que siento lo mismo y ser capaz de mandar sobre lo que siento, pero no es así. Y creo que te mereces que sea completamente sincera contigo.

El silencio les atrapó por unos minutos. Natalia tragaba saliva, esperando que su amigo pudiese entenderla, mientras que Mikel permanecía pensativo, arrugando entre sus manos una servilleta de papel intentando digerir aquel momento. Tras un carraspeo, fue Mikel el que volvió a romper el silencio.

M: ¿Es por Alba? -Preguntó en un tono neutral-.

N: No, esto no tiene que ver con ella, sino conmigo y con lo que siento por ti.

M: Mira Nat, no soy ciego, y por mucho que intentase mirar para otro lado y hacer como que no pasaba nada, tampoco soy tonto. -En ningún momento alzó la voz, aunque Natalia podía percibir un tono dolido en sus palabras-. He visto las miraditas, como os buscabais, vuestros juegos, la forma de trataros... Todos lo hemos visto, ¿vale? Álvaro, Ici, yo... Así que al menos dime la verdad. -Por un momento puso su mano sobre la de Natalia-. No te juzgo, ¿vale? Solo quiero entender todo esto

N: A ver, Mikel... -La morena dejó escapar un suspiro, tratando de encontrar las palabras adecuadas-. Es cierto  que desde que nos conocimos en los castings Alba y yo conectamos de una manera especial y que.... me gusta -Confesó en voz alta, sin querer entrar en demasiados detalles que pudiesen hacer sentir mal a su amigo o hacer que culpase a Alba de algo de lo que no tenía ninguna culpa-. Pero eso no tiene nada que ver en esto. No lo hago por ella o por lo que pueda haber entre nosotras, lo hago por mí y por ti, porque creo que a la larga nos haríamos mucho daño y estropearíamos todo lo bueno que hemos pasado juntos.

Mikel tenía muchas preguntas sobre su relación con Alba y sobre qué había podido suceder mientras estaban en la academia. Por mucho que Natalia le dijese lo contrario, estaba totalmente convencido de que el motivo de la ruptura era la rubia, pero había notado la incomodidad de la morena y sabía de sobra que lo mejor era no insistir en el tema, por lo que se dio por vencido por el momento.

N: Yo entiendo que esto no es fácil y que no debe ser nada agradable para ti, y entendería que estuvieses enfadado, o que necesites tiempo o... Yo qué sé. Pero no me gustaría que perdiésemos nuestra amistad.

M: Natalia, ahora mismo estoy jodido, no te lo voy a negar, y hay cosas que no entiendo y me gustaría que las cosas fuesen de otra manera. Pero respeto tu decisión, ¿vale? Y no quiero que esto cambie nada entre nosotros. Por encima de todo somos amigos, formamos un grupo cojonudo y, por mi parte eso no va a cambiar. Además, te agradezco mucho que hayas sido honesta.

Tras aquella conversación ambos se fundieron en un intenso abrazo. Hacerle daño a la gente que quería era uno de los grandes temores de Natalia, y encontrar el apoyo de su ex le había quitado un gran peso de encima. Mikel, por su parte, había decidido tragarse para él las dudas y los celos que había sentido y que seguía sintiendo por Alba, aunque en el fondo se aferraba a la idea de que Natalia estaba confundida después del encierro y mantenía la esperanza de que  la morena se daría cuenta de que lo que sentía por la rubia no era real y entonces, quién sabe, quizás podrían recuperar lo que tenían.

Cuando se recompusieron de la intensa conversación que habían mantenido, retomaron su tarde de compras entre risas y bromas. A pesar de todo Mikel parecía estar esforzándose por quitarle hierro al momento que habían vivido y hacer que Natalia se sintiera bien, cosa que la morena agradecía enormemente. En un momento de la tarde Natalia le robó una foto a su ex, que poco después subía a las historias de Instagram como muestra de gratitud. 




DecisionesWhere stories live. Discover now