Tiempo compartido II

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El día 2 de enero habían decidido dedicárselo por completo la una a la otra. Natalia se había despedido de su familia, que aquel día había decidido irse a hacer turismo por su cuenta, y había puesto rumbo a una pequeña cafetería en la que había quedado con Alba. Cuando llegó la vio ya esperándola en una de las mesas de la terracita mientras trasteaba el móvil, al final se había entretenido demasiado.

N: ¡Hola guapi! -Se acercó a saludarla con un largo beso en la mejilla-. ¿Llevas mucho esperando?

A: "¿LlevAS mucho espeRANdoOO?". Cómo se nota que llevas unos días con tu familia -La ilicitana la devolvió el saludo entre risas por aquel acento que había sacado-. Que va, he llegado hace un momento. Es que la Mari y Pablo tenían que salir y ya he salido con ellos.

N: Es que me he entretenido con mi hermana, perdona.

A: No pasa nada, cariño. Estaba hablando con los Javis. ¿Te han dicho algo?

N: Creo que me ha llegado algún WhatsApp por el camino pero no he llegado a leerlos. ¿Por qué?

El camarero llegó con un café para cada una y unas tostadas de aguacate, y a Natalia no le pudo gustar más aquel detalle. Le encantaba el punto al que habían conseguido llegar, en el que no les hacían falta palabras para entenderse y en el que ambas conocían perfectamente los gustos y las preferencias de la otra.

A: Pues les he dicho que estábamos en Madrid, porque me dijeron que cuando estuviese por aquí me quedase en su piso si quería, y dicen que podemos quedarnos en su casa esta noche y así conocemos a Diane Guerrero que está pasando unos días con ellos.

N: ¿¡Diane Guerrero tía?! -Preguntó totalmente sorprendida, abriendo los ojos todo lo que podía y provocando una carcajada en la rubia, que había puesto exactamente la misma cara hacía unos minutos al leer aquello-.

A: Si, tía, yo he flipado igual. O sea, es que es surrealista totalmente.

N: Pues guay, ¿no? ¿A ti te apetece?

A: Sí, estará guay.

Desayunaron tranquilamente, hablando sobre los planes de la familia Lacunza, las locuras de María y Pablo con sus "despertares musicales" y fantaseando por cómo serían las mañanas en su piso cuando se fuesen a vivir juntas, que esperaban que fuese pronto. Una vez terminadas las tostadas pusieron rumbo hacia el centro comercial en busca de algo de ropa con la que renovar sus armarios. Caminaban agarradas del brazo, manteniendo las distancias al estar en un sitio público pero sin perder en ningún momento el contacto, y sus sonrisas no se borraban de su boca en ningún momento.

El tiempo juntas se les pasaba volando, pasando de una conversación a otra bromeando y quedándose ambobadas la una en la otra de vez en cuando. Tanto que cuando se dieron cuenta era la hora de encontrarse con los Javis, que ya les esperaban acompañados por Diane y su novio. El encuentro con ellos fue un tanto extraño, ya que no terminaban de creerse estar viviendo un momento tan surrealista como aquel, compartiendo el mismo espacio y tiempo con una actriz internacional como era Diane, pero aquella sensación duró poco. Lo cierto es que los 6 habían congeniado a la perfección y lo habían pasado en grande. Cerca de las 7 de la tarde habian puesto rumbo a un salón de belleza al que los Javis solían ir de manera habitual. Mientras Diane, su novio y Javi Calvo aprovechaban para ponerse a punto, las chicas y el otro Javi les esperaban en una especie de salita tomando un café.

J: ¿Y vosotras qué tal chicas? ¿Cómo estáis viviendo la salida al mundo real?

N: Es todo un poco raro, la verdad. Pero bueno, la verdad es que bien. -Contestó mirando a Alba de reojo, algo que hacía siempre de manera inconsciente cuando tenía a la rubia a su lado-. Estamos todos un poco agobiados por todo y como que nos echamos mucho de menos, pero supongo que es normal.

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⏰ Last updated: Sep 15, 2019 ⏰

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