Decisiones

Preámbulo 7: Stupid love song

Natalia se había quedado dándole vueltas a la conversación que tuvo con Miki. Era plenamente consciente de que Alba y ella tenían que hablar, y por mucho que se hicieran las locas y prefiriesen seguir disfrutando sin plantearse nada, lo cierto es que lo mejor era hablar antes de salir de la academia para saber a qué atenerse y dejar las cosas claras antes de enfrentarse a sus respectivas realidades. Esa era la teoría, pero la práctica no estaba resultando tan sencilla. Sumergidas en el día a día, en el ritmo constante de trabajo que seguían en la academia y centradas en la recta final del concurso, tanto la navarra como Alba se dedicaban a disfrutar de los momentos que tenían juntas, dejando de lado esa conversación que parecía resistírseles.

Sin embargo, aquella noche en el chat Natalia se había encontrado con una sorpresa con la que no contaba. Entre los videos que Noemí había decidido ponerles aquella noche se encontraba la cover que una chica de Suecia había hecho de la canción que había compuesto al principio del concurso, inspirada en todas las emociones que empezaba a provocar en ella la ilicitana por aquel entonces. La morena había sido incapaz de enseñársela a Alba porque se sentía demasiado expuesta en aquella canción, siendo Miki el único que conocía la historia que se escondía detrás. En cuanto reconoció la letra que cantaba la chica miró a Miki con cara de pánico, quien le devolvió un gesto con el que pretendía decirle que era el momento perfecto para hablar con Alba.

El resto del chat Natalia lo pasó de los nervios, siendo consciente de que tenía que encontrar el momento para hablar con Alba y explicarle el significado de aquella canción. Ver la repercusión que parecía haber tenido aquella canción fuera de la academia, llegando hasta Suecia ni más ni menos, la había hecho darse cuenta de que al salir la ilicitana se iba a enterar de todo igualmente, por lo que mejor que lo hiciera de su boca.

Tras el chat, Alba se había ido a la terraza para fumar tranquilamente mientras sus compañeros empezaban a prepararse para irse a la cama. Miki, antes de irse para la habitación fue a darle las buenas noches a Natalia, aprovechando para decirle que era su momento de ir a buscar a la ilicitana. Mientras buscaba su chaqueta para protegerse del frío, la navarra respiró hondo encontrando el valor que le hacía falta y, sin pensarlo más, salió a la terraza junto a Alba.

N: Hola bebé -Saludó sentándose a su lado en el pequeño sofá de dos plazas-.

A: ¡Hola finalista! -Contestó con una sonrisa, dándole el paquete del tabaco y el mechero-.

N: Bua, qué fuerte tía. Estoy flipando todavía.

A: Si es que te lo mereces Nat. Vas a ganar tú.

N: ¡Anda ya! ¿Qué dices? -Protestó-. Tendrías que haber sido finalista tú con la pedazo de actuación que te has marcado.

Entre calada y calada iban comentando la gala, las mejores actuaciones, los fallos, los finalistas, lo que podría pasar la próxima semana... Mientras tanto Natalia intentaba buscar la mejor manera de sacar el tema, pero el tiempo iba pasando y no le salía nada. Antes de poder seguir hablando, llegó una de las chicas del equipo para decirles que no podían estar allí, por lo que tras apagar el cigarrillo ambas se fueron a prepararse para irse a la cama. No tenían nada de sueño y la morena todavía tenía pendiente hablar con Alba, por lo que decidieron irse juntas a la cama de Alba, que era la más cercana a la puerta, aprovechando que sus compañeros estaban completamente dormidos. Pocos minutos después Natalia decidió cortar aquello por lo sano, soltando la bomba de golpe.

N: Por cierto, poco se habla de que la canción que me han puesto en el chat de la sueca es la que habla de ti -Soltó, mirando hacia otro lado como si la cosa no fuese con ella, mientras Alba se había girado mirándola sorprendida-.

A: ¿Perdón? ¿Cómo que sobre mi? - La ilicitana intentaba recordar bien la letra de la canción, pero entre que solo la había escuchado una vez y el jaleo del momento, no podía recordar nada-.