𝐋𝐈𝐌𝐄𝐑𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀 [KooKMin]

10. YO LO SIENTO

—¡No lo digas, si! ¡NO ME LO REPITAS OTRA VEZ! Por...por favor ya no lo digas.

Antes de ingresara la sala... logré oír su voz.

Mis ojos cristalizándose se elevaron y mi voz entrecortada leyó con suma pesadez las seis letras del indicador que colgaba de la puerta.

Era una palabra tan destructiva para el ser humano y el corazón, que el dolor interno que generaba al leerla no tenía un nombre específico ni mucho menos una explicación.

Lo han experimentado alguna vez.

Todos lograron sentir el devastador sentimiento de aflicción apenas se enteraron de la triste noticia.
Y otros con una personalidad aún más fuerte recién lo percibieron al ingresar al salón, acompañados con un ramo de flores en su mano para verlo una última vez.

Todos alguna vez hemos despedido a un ser querido.

Todos alguna vez hemos llorado abrazado a quién teníamos a nuestro lado para aliviar la pesadez del dolor.

Y todos alguna vez... también hemos callado el lamento para dedicarnos sólo a mirarlo, a contemplar las coronas de flores próximas a marchitarse y a quienes nos rodeaban.

Y es que la verdad, no existe consuelo alguno cuando un ser querido es víctima de la muerte.

Ella es tan cruel.

Que si quiere te avisa de la próxima partida.

Sino opta por trabajar silenciosamente, arrebatandonos en un abrir y cerrar de ojos a quienes más amamos y apreciamos.

Es tan dañina, que nos lastima hasta el punto de llevarnos al colapso total, ya sea físico como mental de todo nuestro cuerpo.

Estoy acostumbrado a ver día a día a pacientes morir, pero hoy mismo no quiero ser una persona consciente de lo que sucedió. Ahora sólo deseo ser un niño inocente, que no entiende lo que sucede al oír los llanteríos y al ver a las personas abrazarse.

Quiero ser un niño que llora sin sentido al ver que todos lo hacen.

Deseo ser un inocente que no sabe el verdadero significado de la muerte, pero que aún así quiere formar parte del montón devastado, demostrándolo a través de su triste sollozos.

Yo... Jeon Jungkook deseo ser un niño estando los brazos de un mayor para cuando me dejen verlo por última vez. Yo quiero ser pequeñito, para pedirle a quién sea de los presentes vivos que despierte a quién está durmiendo en la supuesta paz.

Pero sé que es algo que nunca sucederá.

Porque hoy, me enfrentare a la muerte de la forma más dolorosa que puede haber en esta vida.

De la forma en que mucho de nosotros nunca llegarán a poder presenciar.

...

Al abrir la puerta mis vista descendió hasta mis dos colegas de trabajo que se encontraban sentados en el sillón de la angosta sala de espera.

Los quejidos se oían por toda la morgue.

Y viéndolos tan devastado no lo pude resistir, necesitaba pedirles perdón por mi fracaso. Entonces llorando me acerqué hacia ellos y me arrodille al frente de ambos.

Los tres nos miramos y yo...

—Lo-Lo siento tanto— me disculpé sintiendo ser el único culpable por la muerte de su amigo— Yo lo lamento tanto. Por...por favor no me odien.

Sin su permiso apoyé mi cabeza sobre los muslos unidos de Jin y Taehyung buscando un poco de su compasión. Llorando abrazaba sus pantorrillas no queriendo levantarme para traspasar las dos puertas blancas.