Monólogos de un amor imposible

Monólogo 5: Estatua de Hielo

Se perdió la magia, se perdió la razón, no queda nada más que sufrimiento en mi corazón.

Quiero pensar que nunca va a suceder, que es solo una tontería más, en cambio no desaparecen las dudas de mi mente. Se que no hay razón para derramar más lágrimas, se que debo alejarme, tan lejos que no pueda observar tus ojos, tan lejos que no pueda ni dirigirte palabra.

Me gustaría que suceda, lo que nunca sucedió, que se desvanezca ese pensamiento que no me deja vivir. Que se acaben ya las falsa esperanzas, que termine ya esta historia sin fin.

Espero volver a amar y no convertirme en una estatua de hielo, congelada, sin sentimientos, que quema cuando la tocas, que aleja a las personas. Ese hielo al que tu te asemejas, que esta a punto de derretirse, de perecer, de regresar a ser agua, para en un futuro no muy lejano volver a ser hielo.

No tienen explicaciones las sonrisas, tampoco ayuda la situación. Nos encontramos como dos náufragos en una isla, discutiendo por la mínima tontería, observando las gaviotas.

Y llego el momento de poner fin, de acabar con esta farsa, de dejar de sentir, terminar lo comenzado, finalizar el dolor.