Capitulo 2

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Finalmente logre calmar a Sia quien estaba llorando a mas no poder cuando entre a verla al baño, pero tenia demasiada vergüenza como para volver a la fiesta.
No quiso contarme que paso y la entendí, los hechos eran demasiado recientes y aun estaba algo alterada así que decidí preguntarle luego.
Me pidió volver a casa, cosa que acepte. Ni ella ni yo estábamos de humor para volver a la fiesta. No sabia nada sobre Leigh y Margo hace rato pero estaba segura de que seguían allí abajo y no quería cortarles la diversión. Mande un mensaje a cada una:

Texto a Leigh:

«Sia se sentía mal y me pidió volver a casa. Pásenla genial, y no olviden el juramento»

Texto a Margo:

«Sia se sentía mal y me pidió volver a casa. Pásenla genial, y no olviden el juramento»

Guié a Sia hacia el auto. Camino a este no encontré rastro alguno de Leigh o Margo, y mucho menos de el chico de hace un rato. Suspire. En serio había perdido esa oportunidad. 

Mi casa no quedaba muy lejos de la de Holton, a unos cinco minutos en auto y unos diez o quince caminando. Pero ese tiempo fue suficiente como para que Sia se quedara profundamente dormida en el asiento del acompañante. Algo me decía que no iba a enterarme hoy de el porque Sia se puso como se puso. 

Mi padre era piloto de avión y mi madre azafata, por ende casi nunca estaban en casa y hoy no era una escepcion.
Con el paso de los años y varios castigos de por medio, gane la confianza suficiente por parte de ellos como para que me dejaran la casa sola durante sus viajes, solamente tenia que mantenerlos al tanto de como iba todo. Podía llevar amigas, chicos, lo que quisiera pero ellos debían estar al tanto si había alguien en la casa conmigo o no. 

Desperté a Sia lentamente para no sobresaltarla. 
-Sia, ya llegamos a casa, vamos- Sacudí lentamente su hombro pero no obtuve respuesta -Sia vamos.
Sia abrió sus ojos lentamente y me miro confundida, miro el auto, luego la casa y luego a mi nuevamente y sin emitir palabra alguna se puso de pie y camino hacia la casa. Escalofriante.
Yo entre unos minutos después luego de cerrar el auto y bajar algunas cosas. Decidí dejar la puerta de la casa sin cerrojo porque aunque Leigh y Margo supieran donde escondemos la copia, tenia el presentimiento de que llegarían demasiado borrachas como para recordarlo.
Mi casa era grande, gracias a los lujosos gustos de mis padres y tambien gracias a sus trabajos que les daban la posibilidad de concederme esos gustos.
Por mi parte la casa me parecía hermosa, pero su gran tamaño la hacia sentir un poco fría y solitaria cuando ellos no estaban.
Subí las escaleras que daban al pasillo. A la derecha apenas entrabas había una habitación de huéspedes, la puerta estaba abierta y bajo las sabanas se distinguía un bulto en la oscuridad lo que indicaba que Sia se había acostado ahí. 

Seguí caminando hasta llegar a la habitación de mis padres y deje la puerta abierta para indicarles a Margo y a Leigh -si es que no caían rendidas en el sofá primero- que se recuesten a dormir en la cama de mis padres. Ellos nunca tenían problema en eso. 

Por ultimo llegue al final del pasillo y abri la puerta de mi habitación.
Había elegido esta habitación por tres razones;
La primera porque, era bastante espaciosa.
La segunda porque, tenia un balcón.
Y la tercer razon, era la única habitación de la casa por la cual podías subir al techo, cosa que me encantaba porque a la noche podían apreciarse las estrellas - otra de las cosas que siempre me habían gustado-.

Sin cuidado alguno, sin siquiera cambiarme la ropa o sacarme el maquillaje me tire de panza sobre mi cama.
Quería olvidar todo lo que había pasado esa noche, quería dejar de pensar en ese chico. 'Dejar de pensar en su sonrisa, en la manera en la que lograba que mi piel se erizara en un cerrar de ojos, en cuanto su aliento rozaba mi cuello. Pero mas que nada quería olvidarme de lo cerca que estuve de descargar toda esa tensión que me había hecho sentir desde que lo vi caminar entre la multitud. 
Por unos segundos sentí algo de enojo hacia Sia, enojo sin razón, un enojo totalmente estúpido. ¿Enojo por no haber entrado en pánico unos segundos después? ¿Enojo por haber interrumpido mi momento y no el de Margo o Leigh? ¿Enojo por haber ido a llorar a ese baño y no a cualquier otro?, no podía creer que pensara eso, que estupideces egoístas estoy diciendo.
No es culpa de Sia, es culpa del destino que viene a joderme otra vez. Necesitaba dormir, necesitaba dejar de pensar estas idioteces. Necesitaba dejar de pensar en ese idiota.

"F" of forever [Felix sandman]Where stories live. Discover now