"F" of forever [Felix sandman]

Capitulo 5

Cerré mis ojos un momento y trate de asimilar lo que acababa de pasar. Mis pensamientos rondaban alrededor de la agitada respiración de Felix y en la manera en la que nos besamos. Mi mente seguía aun muy confundida y sin poder centrarse en algo fijo.
Comencé a recuperarme lentamente pero entonces sentí los labios de Felix posarse en mi cuello. 
Uno, dos, tres y cuatro besos iba colocando mientras bajaba por mi cuello hasta mi clavícula. hundí mis dedos en su pelo, empujándolo aun mas cerca de mi piel. En ese momento la ultima cosa que deseaba era que se alejara. 
Felix continuo dejando besos por mi cuello, esta vez continuo su camino hacia arriba alejándose cada vez mas de mi clavícula y acercándose a mi oreja. 
Podía sentir su respiración caliente sobre mi piel, haciéndome vibrar hasta el ultimo centímetro de mi cuerpo, claramente el lo notaba y estaba gozando tener ese efecto en mi, porque no paraba.  

-Fe-felix- Jadee en un susurro, lo que hizo que el sonriera contra mi piel. 

Sentí mi teléfono vibrar en mi bolsillo y delibere si debía responder o dejarlo ahí. Finalmente decidí no contestar y luego de un minuto dejo de sonar.
Volví a centrarme en lo que estaba pasando. 
Abrí mis ojos lentamente y mi mirada volvió a encontrarse con la suya. Una mirada profunda de la que no podía despegar la vista. 
Mis manos seguían aun detrás de su nuca, enredando pequeños mechones de pelo alrededor de mi dedo. 
Había una distancia mínima entre nosotros, lo suficientemente pequeña como para que nuestras respiraciones se mezclaran. No dude ni por dos segundos en hacerla desaparecer. 
Empujando de el hacia mi volví a unir nuestros labios en un beso. Nuestras lenguas peleaban incesantemente por el dominio. El beso era cada vez mas intenso, pero dejándome aun con ganas de mas y mas.
Volví a sentir el teléfono vibrar en mi bolsillo y seguido sonó una melodía lo que indicaba que tenia una llamada entrante. Maldije para mis adentros. 
Coloque una mano en su pecho y aleje a Felix quien luego de morder mi labio inferior por ultima vez, desistió y se deslizo hacia su asiento y comenzó a arreglarse el cabello desordenado mirándose en el espejo. 

Saque el teléfono de mi bolsillo y leí el nombre en la pantalla, "Mama". No dude en contestar, que mi madre tenga tiempo o señal para llamar era todo un milagro. 

-¿Que tal, cariño?¿Como va todo?- Dijo en su tono maternal. 
-Hola mama. Todo va genial, mas que perfecto.- Conteste. Pude ver de reojo a Felix aguantándose una sonrisa de autosuficiencia. 
-Me alegro mucho hija.- Dijo ella y pude escuchar un silencio nervioso del otro lado del teléfono.-Escucha... yo... Llamaba para decirte que el clima no es muy bueno donde estamos y los vuelos han sido cancelados hasta nuevo aviso.- Aguardo en silencio por mi reacción pero como no conteste siguio hablando.- No estoy segura de cuando vamos a volver... Podría ser en dos días...O podría ser en una semana.- 

Para mi no era nada nuevo el hecho de que retrasen los vuelos y que la vuelta a casa de mis padres sea mas tardía, ya había sucedido repetidas veces. El recibir esa llamada tampoco era algo que me pusiera feliz porque claramente los extrañaba, pero tampoco era algo que me pusiera triste. 

Asentí lentamente con la cabeza, no en respuesta a mi madre porque claramente no podía verme, pero de todos modos lo hacia. 
-Esta bien.- Conteste finalmente. 
-Ahora tengo que colgar, la tormenta va a cortar la luz en cualquier instante.- Podía sentir el tono angustiado de mi madre a través de el teléfono. 
-Hasta luego, Ma. Te amo, cuídense.- Me despedí. 
-Yo también te amo, Maggie.- Se despidió también ella. Seguido de eso colgó el teléfono. 

Gire a ver a Felix quien seguía peinándose. Me aclare la garganta para llamarle la atención, pero aun así seguía demasiado perdido en si mismo. 
-Bueno, creo que ya es hora de que me vaya.- Dije lo suficientemente alto como para desviar su atención, cosa que logre. 
-Esta bien, pero antes...- Dijo inclinándose hacia delante. Creí que iba a besarme nuevamente pero en cambio, tomo mi teléfono. No dije nada y lo observe entrar a la agenda. Movió sus dedos ágilmente por la pantalla y me lo devolvió. -Ese es mi numero, ya sabes que hacer.- 
Aguante una sonrisa. Su ego era tan grande como un elefante, pero de alguna extraña manera eso me gustaba. 
-Voy a tenerlo en cuenta.- Conteste seguido de un guiño.- Hasta luego, Felix.- 
Escuche el sonido de las puertas del auto destrabarse y supe que era hora de volver a casa, asi que me acerque a Felix para saludarlo.
Me incline para besarlo en la mejilla pero sus planes no eran los mismos. Con un ágil movimiento cambio el destino de mis labios haciendo que lo besara una vez mas. Este beso era mas tranquilo que los anteriores, cosa que agradecí, porque estaba segura de que si volvía a besarme con la intensidad de antes ya no iba a poder controlarme. 
-Hasta luego, Mags.- susurro contra mis labios y luego sonrió, haciéndome sonreír también.