Mi última primavera

quince

Cuando Gowasu terminó con Surt estaba agotado. Que presión más fuerte. Sin duda alguna ese Supremo Kaiosama amaba a la ángel Cus de una manera que era difícil de explicar y que él no sabía llegaría siquiera a alcanzar, porque superarlo era imposible.
De rodillas en el piso,aun sin recuperar el aliento no estaba muy seguro si hizo bien o no en aceptar aquel trato. Sin dudo ahora podía entender todo mejor y por eso mismo se cuestionaba si debía seguir adelante. Sonaba cruel,pero sólo debía esperar a que lo inevitable sucediera y Cus quedaría en libertad,pero es que eso sería...

Si ella se enteraba de la verdad sin duda no se lo tomaría bién, pero ¿Qué más podía hacer? Por ella,por su felicidad estaba dispuesto a lo que fuera. El valor que no tuvo antes lo tenía ahora y lamentaba haberse perdido de tantas cosas que ya no eran posible. Le enseñó a Surt lo pertinente,pues si sabía demasiado de ella sería contraproducente. Él tenía que descubrila como ella a él.

Un par de días después Cus y su dios de la destrucción fueron a ver al nuevo aprendiz de Supremo Kaiosama. Romoush estaba bastante interesado en el asunto,lamentablemente Surt no causo una buena impresión. Estaba sucio por haber estado limpiando la bodega y llevaba una gorra de piel con un polluelo sobre ella que no dejaba de piar. Su aspecto era cómico y lamentable a la vez.

-Señor Romoush,mi aprendiz Surt-dijo el Supremo Kaiosama con resignación,pero conteniendo la risa por el aspecto que el pobre muchacho tenía.

-Encantado de conocerlo,señor dios...Digo señor Romoush-exclamó Surt inclinado la cabeza en reverencia.

Aquel acto hizo al polluelo caer, pero el aprendiz lo atrapó en sus manos.

-¿Gowasu,podemos hablar?-le dijo el dios dandole una mirada de desaprobación a Surt.

-Desde luego,sígame por favor-le dijo el Supremo Kaiosama y se adentro en el templo seguido de hakai-shin.

Surt,sabiendo que su presentación no fue lo mejor, levantó la mirada y se encontró con la de Cus que lo veía divertida. No pudo evitar sentirse avergonzado por todo el asunto y sin nada inteligente que decirle sólo se le ocurrió exclamar:

-Hola...

-Hola Surt-le respondió ella-Creo que estás cuidando muy bien a ese polluelo...

-¡Pio!...el polluelo se llama Pío...es que es lo que siempre dice y tenía que llamarlo de alguna forma.

Cus río y extendió la mano para recibir a "Pío". El pequeño pajarito se mostró muy a gusto con ella y Sour no le quitó los ojos de encima.

-Es tan bonita...-murmuró el aprendiz.

-¿Qué dijiste?-le preguntó ella

-¡El ave! Es tan bonita es que es una hembra...

-Te equivocas,es un macho...

-¿Sí? Bueno cualquiera se equivoca-rio Surt nervioso.

-En estas cosas un Supremo Kaiosama no debería cometer ese tipo de errores. Se supone que debe reconocer toda clase de especies -le dijo Cus y le devolvío el avecita-Pero bueno aún eras un aprendiz así que no es tan grave...

-No,supongo que no...-le dijo él algo avergonzado-¿Le gustaría tomar algo de té mientras espera?

-Sí,me gustaría...

Un té con una rebanada de limón fue lo que le sirvió Surt. Aquello le llamó la atención a Cus.

-Bueno es que he notado que así es como le gusta...

-Así es,pero no siempre fue de esta manera...

Desde la ventana de la sala Gowasu,veía la escena y si bien era lo que buscaba,se le encogia el corazón.