Enamorada De Mi Tatuador || (MYG) [TERMINADA]

Qué dices?

—nira qué diablos tramas?—dije asustada

—Jungkook sabrá lo qué es jugar por las malas, de ahora en adelante el chantajeador se volverá el chantajeado— dijo en tono firme y preciso.

—qué?— aún estaba confundida.

—qué Jungkook se va a arrepentir el momento en qué te amenazó, se acabaron los juegos Miungi—

Jungkook la pagará muy caro...

Definitivamente Nira se había vuelto loca, ahora no entendía que tramaba.

—y ahora qué?— la miré mientras tomaba unas cosas de la cocina.

—nada, solo queda esperar—abrió la lata de coca cola y se tiró en el sofá mientras encendía la televisión.

—esperar qué?— caminé hacia a ella mientras me sentaba en él sofá.

—esperar que llegue Jungkook—me miró— oh pretendes ir por el a la tienda donde está Yoongi?—alzó levemente una de sus cejas en modo de pregunta.

—¿qué?—a este punto ya no estaba entendiendo nada.

Nira me vas a explicar qué pretendes en este instante, me paré frente a ella mientras le apuntaba con el dedo medio y me quedaba esperando una respuesta.

Sencillo tu solo esperas qué Jungkook llegue a casa y lo traerás aquí, luego de eso yo me encargo.

Lo dijo con la paciencia más grande, era claro que Nira estaba tramando algo y no acabaría bien.

Horas pasaron y yo solo caminaba frente a la ventana de la sala esperando ver algún rastro de qué Jungkook apareciera en su casa.

Luego de haber esperado como si hubiese sido siglos veía como una silueta caminaba por la cera en dirección a la casa de los lee.

Era el!...

—llegó!—grité y Nira se puso de pie y se unió a mi mientras ambas observábamos por la ventana.

—Es hora de que actúes Miungi, tráelo hasta aquí—Nira decía mientras me sujetaba ambos hombros mientras me miraba fijamente

Respiré e inhale hondo, caminé hacia la entrada de la casa y abrí la puerta.

Aquí vamos...

—hey, Jungkook!—grité mientras salía de mi casa y cerraba la puerta tras de mi.

El se giró y me observó luego sonrió ladinamente con esa sonrisa qué le caracterizaba.

—vaya vaya, siento qué los papeles se han volteado— dijo mientras caminaba hacia mi.

—tenemos cosas de que hablar—dije mientras evitaba mirarle a la cara.

—ah si?... y qué es eso qué quieres hablar?—llegó frente a mi y se paró de golpe a solo centímetros de mi cara.

—p-pues...d-de lo q-qué me has p-propuesto— dije dudando.

—al fin aceptarás dejar a Yoongi?—sonrió burlándose—vaya si qué eres bipolar, primero me retas diciendo que no harías ni una sola puta cosa qué te dijera, y ahora serás obediente y harás lo qué te pido?... a qué coño juegas— clavó sus ojos en mi.