Un día sombrío promete grandes desastres, y justamente ese día lo era. Alaska Hartley fue vista por última vez aquel martes dieciséis de octubre, nadie sabe qué pasó con ella, no hay cadáver pero tampoco se podría asegurar que ella esté viva, no hay...
—Déjalo, que lo estoy haciendo yo y así está bien.
Empujo a Jake y lo aparto de la cocina, porque por supuesto que está haciendo todo mal.
—Yo lo haré.
—Exageras —Dice rodando los ojos mientras se aparta y yo tomo el control.
—No me apetece comida quemada.
Él ríe y se va hasta la sala dejándome sola.
Los últimos días Jake y yo hemos estado más unidos que nunca, lo extrañaba mucho pero todo se siente extraño. Tengo un sabor amargo en la boca desde hace una semana y he estado increíblemente nerviosa.
Como si algo estuviera muy cerca.
Mi piel se eriza sin razón y siento un pequeño escalofrío. Sacudo mi cabeza tratando de tragar el nudo que se formó en mi garganta y continuo cocinando.
La semana ha estado inusualmente calmada, Alex ha pasado completamente de mí desde que empecé a evitarlo, Matt y Chase me hablan ocasionalmente y Jeremy ha estado bastante tranquilo.
Como dije, he pasado más tiempo con Jake y con mi familia.
He querido acercarme a Alex, hablar con el, pero aún estoy demasiado confundida y se que de preguntarle, él no me respondería. Por eso lo evito y él parece estar bien con ello, pero yo no.
Nunca creí que diría esto pero creo que lo extraño, ya empezaba a acostumbrarme un poco a él.
Mi ceño se encuentra fruncido mientras sigo cocinando hasta que noto que Jake me observa fijamente desde la sala, cuando nota mi mirada suspira con cansancio y sonríe un poco antes de voltear.
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Lunes 8 de octubre.
—Eso es todo —dice la maestra y todos empezamos a guardar nuestras cosas —Espero que lean los textos que mandé y traigan el resumen la próxima semana.
Todos se van del salón y antes de que yo pueda hacer lo mismo siento un escalofrío y alguien me detiene.
—¿Podemos hablar? —Es Alex.
—C-claro.
El salón está vacío y él cierra la puerta antes de acercarse a mi.
—¿Qué sucede?
—¿De qué hablas?
—Llevas días ignorandome.... Primero pensé que se te pasaría, pero aquí estoy.... Teniendo que buscarte.