Ecos del Árbol III

3.7K 337 92
                                    

En cuanto término el recuerdo todos quedaron en una profunda contemplación.

Por un lado, descubrieron de quién heredó el vicio del juego su actual Hokage, no su suerte pero si el juego. Por otro lado, acaban de presenciar algo histórico, nada más y nada menos que el primer encuentro entre el Shodaime y el Nuke-nin más famoso de la historia, Uchiha Madara, de quien hasta Naruto reconoce.

—Ya veo... Conque de ahí saco Baa-chan el vicio de apostar-ttebayo– Comento con los ojos cerrados Naruto.

—¿¡Es en lo único que pienses!?– Le grito Sakura irritada.

—¡Claro que no! También pensé que ese joven Madara me recordaba algo a Sasuke-dattebayo.

—¡No se parece a mi!– De inmediato se defendió Sasuke. No quería por cualquier motivo ser comparado con alguien quién, a pesar de ser poderoso y un Uchiha, sus acciones le recordarán bastante a su hermano.

—Claro que si, cuando ponen una cara de mal humor- si justo esa-ttebayo– Señaló la cara roja de ira de Sasuke.

—Dobe...

—Teme.

—Si, el Hokage Hashirama-dono en su tiempo era también conocido por su amor a las apuestas.– Interrumpió no tan sutilmente en la disputa Miku-obaasama. —Decían que gracias a su gran suerte nunca perdía un solo juego, lo que hizo que nadie quisiera jugar con el por temor a quedar en bancarrota.

Kakashi trato de recordar si era cierto y, sorprendente recordó algunos comentarios de Tsunade-sama sobre el increíble "Legendario Vencedor" que era su abuelo.

—Eso correcto. Era conocido como el "Legendario Vencedor"– Le seguía la corriente Kakashi —Y dime Naruto, como la actual reencarnación del Shodaime ¿Que tan bueno eres con las apuestas?

—Bueno pues-ttebayo– Trata de recordar la última vez que apostó Naruto —Cuando viaje con Ero-sennin visitamos un casino para buscar información y me hizo jugar todos los juegos. El dueño al final nos hecho y nos prohibió entrar de nuevo porque vencí a todos sus clientes hasta dejarlos sin dinero ¡Pero Ero-sennin me robo todo el dinero que con gran esfuerzo gane para visitar burdeles!– Exclamó molesto, para después comentar algo apenado —Pero siempre que juego cartas contra mis Kage Bushi termino perdiendo.

—...

—...

—...

—...

—Te prohibieron en un casino– Comento lentamente Kakashi, ante al asentimiento de Naruto siguió —Por ganar.

—Bueno si ¿Eso es raro-ttebayo...?

—...

—...

—...

—... Creo que mejor continuamos con los Ecos.

—Si sensei.

—Hm.

—Estoy completamente de acuerdo.

—¡Ey!

Ignorando las débiles quejas y preguntas de Naruto la anciana tomó a Konjiki y repitió sus acciones pasadas para volver a ver los Ecos desde donde lo dejaron.

Otra vez la niebla aparece en la gran bola de cristal y después de unos minutos la niebla se despeja dejando la imagen de un gran campo, donde decenas de personas entierran una larga hilera de ataúdes.

Esta vez Hashirama esta acompañado por su padre, quien viste una armadura roja anticuada y ha envejecido varios años, Tobirama y el hermano de cabellos de dos colores, que llorando.

Ecos de otras VidasWhere stories live. Discover now