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Capítulo 53 - Banquete familiar Jing (3)

Capítulo 53 - Banquete familiar Jing (3)
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La pareja se puso de pie y caminó hacia el centro del pasillo.

De repente, Mu Mingcheng se detuvo en seco, miró a Gu Jin y luego le ofreció el brazo para escoltarla.  La esquina de sus labios se elevó a una sonrisa elegante, similar a la de un erudito refinado.

Gu Jin inclinó la cabeza y evitó su mirada.  Un mechón de cabello se deslizó hasta su frente y sus brillantes pendientes reflejaron una luz deslumbrante.  Debajo del brillo, su impresionante vestido largo combinaba bien con el sutil rubor en su rostro, agregando un toque de timidez a la imagen de esta digna hija.

Siguiendo las intenciones de Mu Mingcheng, Gu Jin naturalmente colocó su mano alrededor de su brazo y siguió su ejemplo.

Esta hermosa pareja con su comportamiento similar pronto atrajo la mirada obstinada de los invitados a su alrededor.

En este momento, una voz tranquila y anciana resonó en el pasillo, haciendo que la multitud se calmara.  El jefe de la familia Jing pronunció su discurso.  La mayoría de los discursos de apertura para este tipo de banquete tenían el mismo contenido;  agradeció a los invitados por tomarse el tiempo de su apretada agenda para asistir al evento.

El discurso debería haber sido pronunciado por el padre de Jing Ruo, que quería asistir.  Pero como el anciano del Jing había venido en persona, el banquete tenía una mayor importancia.

La multitud escuchó aburrida el discurso hasta que el élder Jing anunció de repente: "Decidí transferir el 5% de las acciones de joyería de la compañía Jing a mi nieta, Jing Ruo".

Esta oración fue como un rayo.  No solo los invitados, sino incluso aquellos familiarizados con la familia Jing fueron sorprendidos.  Aparentemente, nadie esperaba tal movimiento.

Solo había un hombre que estaba tranquilo junto al viejo sin mostrar fluctuaciones en su expresión.  Quién sabía si había recibido la noticia antes o no.

No importa lo que piensen los otros miembros de la familia Jing, nadie se atrevió a cuestionar las palabras del anciano.  Aunque el Maestro Jing se había retirado durante mucho tiempo después de décadas de trabajo y prosperidad, sería imposible para él llevar a su familia a su alto estatus actual sin algún medio de suprimir a las generaciones posteriores.

Cada persona mantuvo sus propios pensamientos.  Antes del evento, los invitados aún tenían que formarse una opinión sobre Jing Ruo.

Después de todo, ella no estaba relacionada con la sangre de la familia Jing.  En comparación con aquellos que eran verdaderos parientes de esta casa, su posición estaba un paso atrás.  Si alguna vez rompe lazos con la familia en el futuro, Jing Ruo no podría ganar nada de valor.

En lo que respecta al dinero, a los presentes en el evento no les faltaba.

Pero ahora la situación ha cambiado.  Al recibir una parte del conglomerado Jing, incluso si era solo una fracción de sus numerosas industrias, esto fue suficiente para demostrar la importancia y el reconocimiento de Jing Ruo dentro de la familia Jing.

Al menos después de este día, el nivel y el alcance de los pretendientes de la señorita Jing Ruo subirán varios niveles.

Un estruendoso aplauso sonó cuando la señorita Jing Ruo bajó las escaleras con la mano apoyada en el pasamanos.

Su apariencia juvenil, al igual que una hermanita inocente de al lado, le recordó a la mayoría de los hombres su primer amor.

Pero el largo vestido rojo que llevaba no se adaptaba a su apariencia.  Su joven rostro estaba pintado con un estilo de maquillaje maduro y alegre, que daba a los demás la impresión de una niña pura pero encantadora.  Esto atrajo la atención de muchos hombres.

El hombre compuesto de pie junto al élder Jing se movió.  Dio un paso adelante para tomar la mano de Jing Ruo, y un ligero calor apareció en su rostro frío y solemne.

Esta fue la primera vez que Gu Jin puso sus ojos en el protagonista masculino de la novela, Jing Hao.