𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐀𝐍𝐙𝐀𝐒 | 𝐋𝐞𝐯𝐢 𝐀𝐜𝐤𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧.

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Importante al final
Léanlo, plis :,,D
Solo eso ¡Disfruten del capítulo! owo
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Muralla Rose: año 850
La batalla de Trost (3)

Todos miraron perplejos a la azabache.

Todo estaba pasando demasiado rápido.

Aún me sentía aturdida tras haber recibido tal noticia.

Jean: -¿Se supone que era un discurso motivador?-se quedó callado un momento-Esto es culpa tuya, Eren-parecía molesto por el tono de su voz.

Ni siquiera me sentía con el ánimo de contradecir a aquel muchacho, o siquiera de hacer algo.

¿Así es como termina la historia?

Jean: -¿Acaso nos enseñaron a dejar que un compañero pelee solo?-continuo diciendo este-¡A este paso, serán cobardes de verdad!-se dirigía a nuestros compañeros que se encontraban ahí, pero por un momento, sus palabras se sintieron un poco personal.

El tenía razón, sería una cobarde si simplemente me quedaba ahí, sentada, lloriqueando y lamentándome por la muerte de Eren. El no hubiera querido que desperdiciara el tiempo así, no de ese modo.

Reiner: -De ningún modo-parecía como si hubiera leído mi mente.

Jean parecía decidido a dirigir a los demás, pero su mirada cambió cuando me miró a mi.

No quería la lástima de nadie. Aunque sabía muy bien que siempre era así cuando se trataba de perder a alguien. Hipócritas.

Jean: -Hey-dijo este con una voz más tranquila comparada con la que suele usar.

Levante mi rostro para poder verlo mejor. El aún estaba de pie a un lado mío.

Jean: -Escucha May-se puso de cuclillas cerca de mi-Eres una de las personas más fuertes que conozco-espero un momento, quizás para buscar las palabras correctas para decirme-No permitas que esto te derrumbe-se levanto de la posición en la que se encontraba, para después irse sin más.

Todos parecían tener miedo, pero eso no fue impedimento para que siguieran luchando.

Sasha: -¡Cobardes! ¡Debiluchos! ¡Idiotas!-gritaba con desesperación-¡May!-llamó mi atención-¡Debemos seguir!-

Me levante de donde estaba para poder seguir a los demás.

Ellos tenían razón. No podía rendirme. No ahora. Ya habría tiempo para derrumbarme después.

Han pasado muchas cosas en tampoco tiempo. Sentía que en cualquier momento mi pecho estallaría. Pero debía aguantar. Por mí...por Eren.
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Habíamos visto caer a tanta gente, en tan poco tiempo.

Gente que se sacrificaba por el bien de la humanidad. Muertes que no serían en vano. Ninguna de ellas lo sería.

Jean: -¡Ahora!-todos nos giramos a mirarlo-¡Vayamos hasta la sede!-todos seguimos al muchacho como si de eso dependiera nuestra vida. Aunque, creo que esa es la única verdad que encuentro-¡Avancen!-

En el transcurso del camino, intentamos acabar con cada uno de los titanes que se entrometían en el camino, mientras resguardábamos el poco gas que nos quedaba hasta llegar por fin a la sede.

Al ver las casas abandonadas que se encontraban por doquier, no pude evitar sentir un nudo en el estómago. Toda esa gente se quedó si hogar por culpa de esos malditos monstruos.

No todos contaban con el lujo de tener un hogar al cual regresar después. No todos contaban con el lujo de seguir con vida.

Al oír los vidrios de aquellas grandes ventanas de la sede quebrarse a nuestra llegada, mis pensamientos se dispersaron por todas partes. O por lo menos eso fue lo que he intente.