La tierra, año 2080. Nada será lo mismo.
Silver es un chico intrépido y decidido que sueña con conocer el mundo. Luego de discutir con su padre, escapa a la noche de San Diego y conoce a un grupo de misteriosos cambiaformas.
Encuentro que lo conduci...
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Silver miraba en silencio los rayos de color azul y verde que giraban alrededor de todo su cuerpo, acostado en una camilla que lo mantenía firme, sujetado en su lugar, su cabeza y extremidades inmóviles. Aunque lo había empezado hacer una vez a la semana desde el evento en la corporación, las últimas 2 semanas, no hacían las cosas nada fáciles.
Su madre insistía en mantener monitoreada su evolución, aunque había podido negarse muchas veces, ella mantenía protegido a su padre, y hasta cierto punto mantenía a la manada de lobos fuera del ojo del huracán.
Los eventos de ese día no habían pasado desapercibidos, pues habían ocurrido muchas muertes, lo cual por supuesto llamó la atención de la opinión pública y de un momento a otro, la corporación pasó a ser las noticias número uno en muchos lugares del país, lo cual, por obvias razones no pasaría inadvertido para nadie. Silver sabía que su madre no había sido del todo sincera en cuanto a lo que pasaba dentro las instalaciones. Pero hacia un excelente trabajo manteniendo la calma.
El sonido de la maquina escáner deteniéndose, le indicó que la revisión había acabado, cuando los seguros que lo mantenían sujetados, se retiraron, se levantó, masajeando un poco sus muñecas.
—No hay necesidad de ajustar tanto los seguros —dijo con algo de molestia.
—Es por tú seguridad —respondió Anne, tomando notas en su holo-tab.
—¿Qué? Temes que me pueda convertir en el próximo Asher —devolvió Silver con sarcasmo.
—Tu comentario esta fuera de lugar. La búsqueda de Asher todavía no ha sido detenida solo será cuestión de tiempo —respondió Anne, sin molestarse por la actitud de Silver.
—¿Y qué pasará si Emelle no logra dar con él? ¿Qué pasaría si lo que hicieron no fue suficiente para detenerlo? ¿Qué pasará cuando quiera regresar y retomar su venganza? —Silver se bajó de la camilla, tomó su sudadera colocándosela.
—Lo estaré esperando una vez más —respondió Anne, enfrentando a Silver.
—¡Por favor! Eso fue lo mismo que dijiste la última vez, y mira como acabó todo —espetó Silver, cruzando sus brazos y apoyándose en la camilla para mirar a su madre.
—Sé que subestimé a Asher y fue mi error, y aun lo estoy pagando, no necesito que me lo recuerdes. Pero la primera vez estaba acompañado. Ahora Kinley, Axton y Ross están en celdas especiales de contención, sus habilidades no funcionan allí.
—Pero la chica que se lo llevó, Alexei, si mal no recuerdo, es casi tan peligrosa como él o ¿Me equivoco? —inquirió Silver enfrentando una vez a su madre.
—Eso es lo que me preocupa. Alexei y Asher desarrollaron una conexión muy fuerte, ambos cuidan y protegen al otro. Son una combinación muy peligrosa, la capacidad de dominar la voluntad y alterar los recuerdos. Podrían hacer que cualquier persona haga lo que ellos quieran y después hacerlos olvidar, pueden moverse sin dejar rastro alguno —respondió Anne, su voz llena de incertidumbre.
