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Se levanto poco a poco, sus piernas no querían avanzar querían seguir ahí con su hija pero era momento de empezar de nuevo de empezar de cero y para eso necesitaba controlar su problema de ira.

Mientras el intentaba con su problema no se imagino que su esposa estaría en una peor situación.

-Betty hija -la llamo su madre con una charola de comida en sus manos.

-¿Qué? -dijo con voz quebrada

-te traje comida mi niña -le dijo con amor. La puerta se abrió muy poco, su cuarto no tenia luz las cortinas cerradas un tiradero en su recamara y las pastillas alado de la cama, la madre la dejo en el peinador.

-come hija esta vez quiero que no dejes nada y comas -le dijo su madre buscándola con la mirada, pero su hija jamás salió detrás de la puerta.

-sal de mi recamara -le dijo con coraje, algo nuevo en ella

-pero hija solo -trato de hablarle pero solo consiguió que su hija la corriera de la peor forma, empujándola hasta sacarla y gritándole que no se metiera en su vida.

Betty se acostó en su cama lloraba abrazando una muñeca de su hija, se sentía sola sin su pedacito de cielo, vacía, ella era lo único que la apoyaba y ahora se había ido, había dormido para siempre.

-¿Cómo esta Betty? -pregunto veronica cuando su madre llego a la sala.

-Mal creo que hoy tampoco comerá -dijo con lágrimas en sus ojos.

-Betty no puede seguir así cada vez empeora no quiero que llegue a suicidarse - decía cheryl abrazando a tony.

-Betty no haría eso -dijo no muy segura veronica

-ya no sabemos de lo que sería capaz, Betty ya no es la misma que antes cambio.

-lo sé veronica pero que podemos hacer traer a jughead

-el no sabes cómo se pondrá Betty y además el está lejos del país -dijo lo último en un susurro. Cheryl y Verónica siguieron peleando por ellos pero al final siempre caí en lo mismo Betty no podía cambiar había muerto junto con su hija ya no quedaba nada por lo cual pelear o seguir viviendo la madre que pierde a su hijo muere con ella.

Varias semanas después llego el licenciado de Betty con un citatorio para que siguieran con los trámites de divorcio.

-Vamos Bettt falta poco -le animaba él.

-¿Cuándo es?

-mañana a las nueve de la mañana -dijo con una sonrisa aquel hombre

-ahí estaré -dijo sin más. Se acostó en su cama y durmió.

-Betty hija -la movía con delicadeza su madre

-¿Qué?

-ya es hora -dijo su madre, Betty se levanto lentamente, se baño y cambio. Su madre la llevo a donde la habían citado. Cuando llego Bettt se quedo sin aliento como la primera vez que lo vio estaba más guapo se miraba diferente lleno de vida.

-Betty -dijo su nombre en un susurro y levantándose de su asiento. Ella lo ignoro y se sentó enfrente del juez alado de jughead

-Jughead Jones, Elizabeth cooper-dijo mirando la hoja que tenía entre sus manos

-¿creen que puedan salvar su matrimonio?

-si

-no -Betty miro a jughead y el a ella

-no -repitió Betty, aquel hombre se le partió el corazón ¿acaso ella ya no sentía nada por él? ¿Encontró a otro? Había muchas dudas en la cabeza de jughead pero ninguna tendría respuesta.

-Bien

-aquí dice que usted quiere la mitad de la empresa del señor Jones , la mitad de la casa y que le dé una suma de dinero por mes

-si

-Usted señor jones está de acuerdo -pregunto el juez mirando

-sí, todo lo que ella quiera lo tendrá -dijo mirándola con amor, ella solo bufo

-Bien firmen aquí -les entrego la hoja y les enseño donde firmar, les entrego una copia a cada uno, se levanto y se fue

-Vamos señorita -dijo su abogado, se levantaron y se fueron, Bettt miro atrás solo para ver como jughead también se iba, el camino a casa fue muy largo, un silencio muy incomodo, cuando llego a casa se encerró en él su cuarto miro el papel lo leyó una y otra vez, no paraba de llorar

¿Qué había hecho? Ella ya no quería el divorcio ya no ya no le importaba nada porque ya no tenía a su ángel, tomo aquel frasco de pastillas para dormir, abrazo con fuerza la muñeca de su hija, se debatía entre tomar aquel veneno en forma de pastillas, estaba embarazada y lo sabía, pero... ese hijo era de aquella bestia que le había causado tanto dolor, que hizo que su ángel muriera.

Tomo con fuerzas las pastillas dejo la muñeca y abraso su vientre.

-Perdóname bebe -se las tomo todas, no dejo nada, se acostó de lado con tristeza tomando aquella hermosa muñeca y espero a que las pastillas hicieras su efecto.

Primero sintió ganas de vomitar todo, pero se resistió al deseo y cerro sus ojos hasta que ya no lo abrió mientras en su vientre el bebe también comía aquel veneno.

El bebe se movía mucho con desesperación. Betty lo sentía, podía sentir aquellos hermosos movimientos de su bebe los primero movimientos pero ya era tarde el bebe no le quedaba mucho de vida, salió una pequeña lagrima de esos ojos casi sin vida y murió junto con aquel hermoso bebe.













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𝖀𝖓 𝖙𝖗𝖎𝖘𝖙𝖊 𝖋𝖎𝖓𝖆𝖑(𝖇𝖚𝖌𝖍𝖊𝖆𝖉)Where stories live. Discover now