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Baekhyun estaba sentado en una de las mesas del café. Su laptop sobre la mesa y sus dedos presionando ágilmente las teclas, rascando su barbilla cuando notó que su redacción sobre la entrevista no estaba quedando como quería. Bufó. Necesitaba un descanso. Tomó la caja de cigarros y salió del local, inspirando el aire fresco de la calle. Sacó uno de los cigarros de la caja y lo llevó a sus labios, dándose cuenta de que no tenía fuego para encenderlos. Suspiró. De repente la imagen del pelirrojo atacando su mente.

"¿Dejarás de fumar? Pff... sí, claro~"

Parpadeó quitando el cigarrillo de sus labios y apretó su puño al costado de su cuerpo. Tal vez no era sorpresa que siguiera escribiendo sobre las mismas cosas y siempre estuvieran los mismos personajes. De alguna manera, era como un quiebre emocional. Su celular en su bolsillo trasero lo despabiló. Lo tomó, llevándolo a su oído.

-Kyungsoo.

-Hey Baekhyun- saludó- Acabo de ver el segundo borrador de la entrevista, ¿así es como saldrá?

-No, no... la estoy arreglando, en realidad- dijo- Te la enviaré la semana entrante.

-Ah, de acuerdo. ¿Escribirás acerca de tu visita al estudio?

-Sí.

-¿Algo interesante?

De pronto recordó la secuencia apareciendo en su cabeza como flashes. Rowoon acariciando y coqueteando sutilmente con Yukhei. Este sonriendo ante su encanto. Él incómodo con el ambiente.

-No, fue bastante ordinario.

-Oh... una lástima.

-Sí. Debo terminar de trabajar.

-De acuerdo, hablamos más tarde.

-Adiós.

Cortó la llamada y se cruzó de brazos, bufando. Odiaba la presión. También odiaba la imagen de él y el castaño besándose en el auto, repitiéndose una y otra vez en su mente. Sus cejas estaban fruncidas y sus dedos inquietos, nerviosos, buscando presionar la tela de su suéter. Su celular una vez más vibró y miró la pantalla, leyendo el mensaje.

Yukhei:
¿Por qué luces tan enojado?

Frunció su entrecejo desconcertado y se volteó hacia ambos lados, deteniéndose en el segundo vistazo cuando lo vio a unos metros. El chico caminó hacia él y Baekhyun solo se quedó pasmado mirándolo.

-Oh, hola.

-¿Por qué luces tan molesto? ¿Algo está mal?

-Solo olvidé mi encendedor.

-¿Necesitas fuego?- inquirió, sacando un encendedor de su bolsillo.

Rápidamente lo abrió, acercándolo al cigarro que el pelinegro había colocado en sus labios.

Rápidamente lo abrió, acercándolo al cigarro que el pelinegro había colocado en sus labios

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«𝐋𝐨𝐯𝐞𝐎𝐫𝐇𝐚𝐭𝐞» ➭chanbaek Donde viven las historias. Descúbrelo ahora