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Seguímos hablando con Jane por varias horas más. Reímos mucho tiempo. Y luego intercambiamos celulares, en unos días nos volveríamos a encontrar en el mismo parque.

Con mi estómago lleno y una nueva persona conocida, me subí a mi patineta y me fuí hasta mi casa. Ya estaba anocheciendo.

Entré por la puerta y allí estaban. Mi madre y Cass quedandose sin aire porque ambas estában en una carcajada muy fuerte. Estaban las dos con una taza en las manos de cada una mientras reían sin parar.

Yo me quedé helada viendo esa escena.

Demonios, ¿porqué ellas se tienen que llevar tan bien? Mientras más bien se lleven, más me hará convivir con su molesto sobrino.

-oh, hola hija!- dice mi madre.- ¿cómo te fué?.

-ehh... muy bien- respondo.-¿ustedes como la pasaron?

-nunca me había reido tanto!- exclama la señora Cass. Mierda. Mamá, te pagaré para que seas aburrida.

-me alegro- finjo una sonrisa- bueno... sigan divirtiéndose, yo... yo iré a mi habitación.

Ahgg.

Cerré la puerta de mi habitación y me tiré a mi cama.

Wow, supongo que este día no estubo tan mal. Me libré de una tarde con Hiro, paseé por la ciudad y conocí a una nueva amiga. Lo único malo ahora es que volví a tener hambre y no iré a la cocina hasta que Cass no se haya ido. Sería muy vergonzoso.

Estaba mirando el techo pensando en cosas totalmente random, y ni siquiera caí en cuenta cuando me quedé dormida entre la oscuridad de mi pieza.

[...]

-¡vamos hija! Llegarás tarde!

-¡ahí voy mamá!- grité desde mi habitación.

Agarré mi mochila y mi celular y me fuí corriendo a la cocina.

Mi madre me esperaba con los brazos abiertos. Yo la abrazé.

-muy bien, te deseo lo mejor para tu primer día de clases en la universidad! Ojalá hagas muchos amigos y que te diviertas. ¡aprende mucho!.- dice dejando un estruendoso beso en mi megilla.

-gracias ma. Lo mismo para ti en el nuevo trabajo.

-ten, come tu desayuno en la cafetería de Cass. Luego nos encontramos aquí ¿si?

-claro, Rose.

-soy mamá!

Salimos ambas a la calle, ella se subió a un taxi y me saludó con la mano, yo me fuí caminando a Lucky Cat Coffé.

Mientras mi cabeza estaba en las nubes, me imaginaba una historia que probablemente nunca pasará, donde Shawn Mendes baja a buscarme en un helicóptero, me pide matrimonio y nos vamos a vivir juntos al Caribe. Pero bueno... soñar no cuesta nada ¿no?

Estaba en medio de mi fantasía cuando siento que alguien me sorprende por atrás.

-¡AY POR DIOS!- grito, me volteo rápidamente y veo la sonrisa de Mark

-lo lamento, no era mi intención asustarte- dice levantando sus manos.

-no pasa nada... ¿cómo estás?- pregunto.

-te Odio.  -yo también te amo. [Hiro Hamada Y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora