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-¡¿que harás que?!

-Mark, tranquilízate- le decía, el rubio que estaba sentado enfrente mío dejó caer un poco de comida al suelo cuando le conté de mi proyecto.

-oye, estás loca.

-las personas locas son las mejores- digo- oye, es el mayor y más comprometido proyecto que eh hecho hasta ahora, debes apoyarme.

-si, lo se. ¿Necesitas que te ayude?- dice.

-no, haré yo sola el proyecto. Pero quiero que lo mantengas en secreto, es una sorpresa, nadie más puede saberlo.

Exepto mi mejor amiga Jane. Se lo conté cuando tuve la idea y casi se infarta, se ofreció a ayudarme en lo que necesitaba y también quería estar ahí cuando lleve a cabo la máquina. Simplemente para ver que nada este fuera de control y que regrese bien. Tambien prometió guardarlo en secreto.

-Aria, es peligroso. Mira si se descalibra el portal y tu te quedas en el pasado sin poder regresar. Como le pasó a tu prima Abigail.

-¿no confías en mí? Te juro que saldrá todo bien. Y en el tal caso de que quede atrapada en el pasado armaré otra máquina para regresar al futuro. Aunque tal vez si se cierra el portal muera, ya que... ya sabes... "pushh"- hago una explosión con mis manos.

-oye es en serio. No soportaría que el portal no salga bien- dice mirandome con cara de preocupación.

-tranquilo, y deja todo en mis manos. Saldrá bien... estoy segura.

-más te vale, sino reconstruiré la máquina del tiempo para matarte antes de que mueras ahí.

Yo suelto una risa.

-yo contruiré una máquina para revivir cuando esté muerta. Nosé como lo haré, pero lo haré. Y ahí te mataré por matarme. Viva la venganza- digo metiendo una papa frita a mi boca.

Ahora él ríe. Se termina el desanso y volvemos a nuestras respectivas clases.

A partir de ahora me quedaré despues de clases a trabajar en la máquina del tiempo, así que así hice.

Dos meses despues...

Bueno... no pasaron cosas muy interesantes durante estos dos meses.
Solo que fué el cumpleaños de Jane, el cual pasé en la casa de su madre porque me invitó a cenar con sus familiares, y también pasó mi cumpleaños diesiceis, el cual no hubo mucho festejo. Los chicos me cantaron el feliz cumpleaños en el Caffé de Cass con una torta de regalo por parte de la tía de Hiro. Y luego lo festejé con mi madre. El resto fué algo remotamente normal y rutinario.

Caminaba cansada hacia la universidad junto a Hiro. Hoy estaba muy cansada.

No solía dormirme, de hecho tenía los horarios muy bien organizados durante este tiempo que estube trabajando en mi proyecto.

Iba a la universidad, cuando terminaban las clases me quedaba unas horas ahí para trabajar en mi proyecto. Llegaba a mi casa, dormía un rato, iba a la cafetería de Cass donde nos juntabamos con los chicos e íbamos a trabajar en nuestros proyectos. Luego volvía, cenaba con mi madre y me ponía a hacer otras cosas o seguir un poco en mi laboratorio. Dormía pocas horas, pero me bastaba.

Lo que pasó hoy, es que me falta tan poco para terminar la máquina que decidí llevar todo a mi casa para avanzar, ya que la ansiedad me estaba comiendo. Necesitaba avanzar y terminar. Y obviamente... eso no terminó bien, ya que terminé durmiendo: 15 minutos.

Si, mala idea.

Y no es que me pasara seguido, de hecho aprobé todos mis exámenes. No volvería a hacer esto nunca.

-te Odio.  -yo también te amo. [Hiro Hamada Y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora