Capítulo 49

1.1K 128 47
                                    

Narra Sana

Desperté acostada en mi cama, con un dolor de cabeza horrible. Me sentía muy débil, agarré el celular que estaba sobre mi mesa y miré la hora. Eran las 8 de la noche.

-Despertaste – era Momo - ¿Cómo estás? – no respondí - ¿Te sientes bien? Sana si quieres puedo llamar a un doctor porque el golpe en la cabeza fue fuerte...

-Si tu doctor es alguien que pueda borrar los recuerdos o que haga a la misma vez un trasplante de corazón y cerebro te lo acepto – la interrumpí – descuida, estoy bien. Creo que solo estoy débil.

- ¿Quieres que te deje seguir durmiendo?

-Solo si me dices que esto es una estúpida pesadilla – dije mirando nuevamente mi celular – y que cuando despierte Tzuyu y yo seguiremos juntas.

-Entonces creo que me acostaré contigo – Momo se sacó las zapatillas y se acomodó al lado mío en mi cama - ¿En qué piensas? – acariciaba mi cabello.

-En como todo se desmorona tan rápido, de seguro Tzuyu a esta hora ya debe estar en Nueva York y en su pieza con nuevos compañeros.

-Ella está cumpliendo su sueño, terminadas o no ella se iría igual – voltee a verla – no me mires así sabes que tengo razón.

- ¿Fui una estúpida verdad?

- ¿Te miento o te digo la verdad? – me acurruqué a su lado y comencé a llora – hey tranquila... ya... ya va a pasar.

-Nunca me había dolido tanto el corazón, ni siquiera sabía si podía doler tanto Momo. Siento como si me lo estuvieran arañando y no se detuvieran.

-Yo...

-Se siente como si me fuera a morir, pero no me muero y la angustia aumenta constantemente.

-Sana...

-La amo Momo, la amo y no sé si pueda soportar esto.

-Creo que te dolerá por bastante tiempo – besó mi frente – pero qué tal si te duermes un rato.

-Dormí toda la tarde.

-Lo digo porque estoy segura que no tienes ganas de levantarte.

-Tengo que ir a hablar con el director.

-Llámalo, dile que estas enferma, que te llego la regla, invéntale algo – sonreí, después de horas sin hacerlo sentí como me dolieron todos los músculos de la cara - ¿Quieres que lo haga yo?

-Invéntale algo, no sé – solté a Momo, le di la espalda, abracé una almohada que como si fuera poco tenía el olor a Tzuyu – quiero dormir.

-Ok, te dejo ¿Qué quieres de cenar?

-No creo que cene – Sentí como Momo salía de la cama, caminó hasta la puerta y la cerró – tampoco creo que este dolor pase tan rápido – dije mirando la carta que había leído de Tzuyu y todo el odio que sentía hacía mi persona apreció.

Narra Tzuyu

Había sido el viaje más incómodo que había hecho desde que tengo uso de razón, creo que solo dejé de llorar unos 5 minutos, también creo que la señora que estaba a mi lado ya me quería meter a un manicomio porque enserio, no podía dejar de llorar.

Se que esto era un nuevo comienzo, pero había dejado tanto atrás. Durante el viaje me pregunté si a lo mejor Sana se había arrepentido, si me había ido a buscar, pero, así como esa idea apreció en mi cabeza también desapareció; aunque se hubiera arrepentido yo no era un perro o uno de sus ex que le había hecho la vida mierda, era el amor de su vida; bueno, se suponía.

Sessions Of Love (Satzu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora