Poco a poco algunos fueron regresando. George, ensangrentado y con una sola oreja. Arthur, más pálido que nunca. Lupin, agotado. Por una vez, Fred perdió la sonrisa hasta que su hermano le habló.
Y la espera continuaba. El silencio era abrumador. Harry y Ginny, muy juntos, mirando al cielo. Hagrid nervioso, restregando sus grandes manos, una contra otra.
Y una escoba apareció, haciendo un aterrizaje forzoso. Tonks corrió a los brazos de su marido mientras Hermione vio como Ron la buscaba con la mirada y fue a su encuentro. Le abrazó y sintió ambos corazones acelerados, como si quisieran fundirse en ese abrazo para siempre. -*Entonces oyó a Tonks explicarle a Lupin lo maravilloso que había estado Ron durante la batalla, llegando a aturdir a un mortífago en pleno vuelo. Hermione, sin soltar el abrazo, le preguntó:
- ¿Eso hiciste? - Y, por supuesto, aquella era una pregunta retórica. Porque ella sabía que él podía hacer eso y mucho más. Sólo lo preguntó porque quería que él lo explicase con sus palabras.
Hermione le miró a los ojos y, por muchas promesas que se hubiera hecho a sí misma, aún sabiendo que Harry se dirigía a toda prisa hacia ellos, sintió que no era incapaz de reprimir su impulso de besarlo. Pero él la apartó antes de que sus labios se juntaran.
- Siempre el tono de sorpresa. - Dijo Ron.
Ya con Harry a su lado, juntos y quietos, con el corazón de Hermione un poco dolido por el rechazo a su beso, se quedaron en el jardín, esperando a los que aún estaban por llegar. Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando Bill y Fleur llegaron y anunciaron que Ojo Loco había muerto. Entraron todos a la Madriguera, ya no tenía sentido seguir allí fuera.
Hermione apenas pudo pegar ojo esa noche. Se sentía muy mal por Harry, porque de nuevo había perdido a un ser querido. Deseaba que Hedwig descansase en paz, allá donde estuviera. Y estaba segura que Harry volvería a pedirles de marchar inmediatamente. Empezar pronto la búsqueda para acabarla lo antes posible. Harry se alegraba por los Weasley, pero no consideraba una boda un motivo de peso para demorar su partida. Hermione temía que en cualquier momento Harry desapareciese, se fuera sólo, sin ellos. Que los quisiera alejar y proteger cómo ya había hecho con Ginny.
Por eso no se sorprendió en absoluto cuando Harry lució hecho un desastre, despeinado y malhumorado durante desayuno, comunicándose con gruñidos con aquel que osara dirigirle la palabra.
El ambiente ya estaba muy tenso cuando Fleur abrió su perfecta boca:
- Segugo que estás depgimido por qué tus amigos van juntos a la boga mientras tú egtas solo. Tganquilo, tu fama te prgcede. Tengo algunas familiages a quien no les impogtaga acompamagte pog un gato.... Un hombgre solo y tgristre deslucigía la cegemonia...
Harry giró la cabeza tan rápido hacia sus amigos que Ginny se sobresaltó y derramó la leche sobre sus tostadas. Harry entornó los ojos, mostrando apenas dos rendijas. Se hizo el silencio en la cocina cuando habló a Ron duramente.
- ¿Sois pareja para la boda de Bill? ¿Y no me lo habías contado?
Hermione se atragantó con el zumo y empezó a toser mientras Ginny le daba unas palmaditas en la espalda. La mirada de Harry se dirigió de nuevo a Ron, quien con las orejas rojas, respondió aceleradamente:
- Bueno, colega, ya sabes. No te montes películas, tampoco es importante. No es que tenga mucho donde elegir. ¿O querrías que fuera con mi hermana?
Fred lanzó un silbido y George se tapó la única oreja que le quedaba. Ginny quedó congelada en su asiento y Hermione se levantó rápidamente, se disculpó y se dirigió a su habitación sin ni siquiera recoger su plato.

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Lo que Harry no supo ver: el secreto de Ron y Hermione
FanfictionHistoria de cómo vivieron Hermione y Ron el séptimo año. Muchas cosas pasaron sin que Harry se enterase...