Capturados

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¡Maldita sea! ¿Por qué cuándo parecía que la situación mejoraba todo se iba a la mierda de nuevo?

Ron reconoció en Hermione un profundo sentimiento de culpa. Sabía que ella pensaba en lo mismo que él. ¿Harry era tonto por naturaleza o se le había escapado el nombre de Voldemort por culpa del reciente Obliviate? No lo sabrían nunca y en realidad daba igual. Lo importante era huir antes de que les capturasen.


Usó el desiluminador para absorber todas las luces de la tienda e hizo un movimiento para colocar a Hermione detrás de él. La vio sacar la varita y se sorprendió sobremanera cuando con ella apuntó a Harry y le lanzó un hechizo que le desfiguró por completo. Tenía el pelo hasta los hombros, barba rala y la cara completamente roja e hinchada. Parecía picar horriblemente y la cicatriz apenas se apreciaba.


Antes de que Ron pudiera darse cuenta, los carroñeros ya les estaban rodeando y apuntando con sus varitas.


- ¿Qué tenemos aquí? - El corazón de Ron se paralizó unos segundos dentro de su pecho. Reconocería aquella voz en cualquier parte. Aquella bestia casi mata a su hermano y le había desfigurado el rostro para siempre. Aún recordaba las historias terribles sobre él que su padre le explicaba a su madre cuando creía que los niños dormían. Lo peor es que no eran cuentos de miedo. Eran reales. Greyback disfrutaba matando, mutilando, torturando, sí. Pero eso no era todo. Abusaba de las chicas antes de comérselas vivas, poco a poco y durante días. Y cuanto más jóvenes más disfrutaba. Adoraba también alimentarse de sangre de bebé. Ron quería gritarle a Hermione que bajo ninguna circunstancia se ciñera la ropa para que su barriga no destacase. Si Greyback apreciaba su embarazo, estaba perdida. Pero era imposible comunicarse con ella.


Para disgusto de Ron, Greyback rápidamente puso toda su atención en Hermione. La olió de cerca y sus ojos brillaron con deseo. Quizás el asqueroso perro percibió las hormonas del embarazo. Pero desde ese mismo momento le puso un nuevo sobrenombre. Ahora Hermione era "su premio". Cuando se dispuso a acercarse de nuevo a ella, Ron ya no aguantó más y le gritó que la dejara en paz. El resultado fue recibir un duro puñetazo que le partió el labio. Pero el dolor ni siquiera le importó. Estaba desesperado, no podía hacer nada por ella. Ni siquiera podía cogerle de la mano para confortarla, pues habían atado a Harry en medio de ellos dos. El elegido siempre enmedio. Qué ironía. 


En un momento que los carroñeros discutían entre ellos Harry preguntó a sus amigos si conservaban sus varitas, a lo que ambos respondieron que no. Una voz susurró detrás de ellos:

- ¡Eh! ¿Eres Harry?

Ron reconoció enseguida la voz de Dean. A pesar que en otro momento se alegraría de ver a su compañero, en ese instante lamentó que él estuviese tan atrapado como ellos. Le había metido la lengua a su hermana, sí, pero era un buen chico. Y Ron sospechaba que él realmente la quiso mientras ella sólo le usó para olvidarse del idiota de Harry. Aunque a decir verdad estuvo por soltarle un "¡Eh, tio! ¡Qué Hermione y yo también estamos aquí!" cuando Dean únicamente saludó a Harry. 


Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando los carroñeros les preguntaron sus nombres. Ron probó de nuevo con hacerse pasar por Stan. Pero esta vez no coló y se ganó otro puñetazo. Ya iban dos y sospechaba que la lista se ampliaría rápido si no decía algo un poco más convicente. Así que confesó ser un Weasley, aunque lejano. Hermione dijo que era Penélope Clearwater. ¿Cómo se le ocurriría pensar en la exnovia de Percy en esos momentos? Seguramente lo tendría ya planeado, como todo. Mientras ella hablaba, Greyback salivaba mirando el movimiento de sus labios. El miedo en su voz parecía excitarle sobremanera. Greyback seguía obsesionado con Hermione y la preocupación de Ron por ella era ya evidente para todos. Estaba aterrado con cualquier cosa que pudiera pasarle a ella y se estremecía cada vez que las uñas encaracoladas y los dedos amarillentos de Greyback se le acercaban. Todos lo notaban y por eso no dudaron en calificarla de "su novia". Qué novedad. Pero aquello era mucho peor que cuando lo hacían sus hermanos para chincharle.

Lo que Harry no supo ver: el secreto de Ron y HermioneWhere stories live. Discover now