𝓓𝓲𝓸𝓼 𝓔𝓼𝓬𝓸𝓰𝓲𝓸́ 𝓝𝓾𝓮𝓼𝓽𝓻𝓸 𝓐𝓶𝓸𝓻 (editando)

capitulo 37

Le había llevado un pastel de mora junto a unas galletas a mi madre me la había pasado con ella todo el día para conocerla más, le comencé a decir mamá y ver sus ojos brillar al llamarla así se sintió bien, llegué a la casa abrazando a mi mama y dandole un beso en su mejilla.

— ¿Cómo te fue cariño? — preguntó

— Bien mamá, me la pasé bien con mi madre — le miró — hoy le llamé mamá.

— ¿Y como reaccionó cariño?

— Le brillaron sus ojos, y se le dibujo una sonrisa mamá — sonrió besando mi frente.

— Eso es bueno cariño.

— Aunque me siento rara, al decirte mamá visitaré a mamá, o mamá hoy me reuniré con mamá— río un poco al igual que ella  — ¿Cómo debería decirle?, ¿Mama escarlett?, ¿Madre escarlett?.

— Cómo te sientas cómoda cariño.

Apoye mi cabeza sobre su hombro mientras mirábamos un programa en la televisión, cuando mi teléfono comenzó a sonar, mire que era emiliano y conteste la llamada que para mí sorpresa en la otra línea estaba rosalie la mejor amiga de emiliano, diciendo que dentro de un rato pasaría por mi para salir los tres mire a mi madre quien asíntio y dije que iría.

— ¿Sabes una cosa cariño?

— ¿Que cosa mamá?

— Me cae muy bien emiliano, es un buen muchacho...— la interrumpi.

— Ay mamá — dije haciéndola reír.

Me quedé unos minutos más viendo la televisión con mi mamá, fui a mi habitación a comenzar me a arreglar tome una camisa de rayas junto un jeans negros rasgado por las rodillas, me había llegado un mensaje diciendo que llevará otra ropa ya jugariamos, tome unos shorts y una camisa  negra con estampados de flores y los metí en un bolso, baje a la sala y me quedé viendo televisión junto a mi mama. A los minutos escuché un claxon seguido de un grito me despedí de mi mamá y salí de la casa, encontrandome con rosalie con la mitad del cuerpo afuera del auto saludandome muy alegré, mire que en los asientos traseros estaban tammy y oscar, le devolví el saludo y me adentre en la parte trasera con los chicos saludandolos muy alegres.

— Hola chicos — chille de emoción saludandoles a todos.

— Hola ry — dice al unisono y rosalie acomodándose en su asiento.

— Siento lo del grito ry — dijo poniendo el auto en marcha.

— Descuida no pasa nada, podría acostumbrarme — sonreí.

— Ves te lo dije — rosalie golpeó el brazo de emiliano — ¿Cómo estás ry?.

— Muy bien gracias a Dios, ¿Y tú cómo estás?, No te vemos mucho.

— Muy bien, lo se la universidad me tiene muy ocupada

—¡Chicos me alegra verlos! — dije abrazandolos ambos.

— Nosotros igual, hoy nos divertiremos — dice tammy.

— ¿Y a dónde iremos ? — pregunté

— A la casa de los mellizos allí nos esperan todos.

Hablaba con los chicos y con rosalie, al llegar a la casa de los chicos salude a todos, Nick nos pidió que entramos a la casa para cambiarnos, al volver con ellos nuevamente Nick nos dijo que jugariamos con pistolas de agua pero en vez de agua tendrían pin y capturar la bandera del otro, su patio era lo suficientemente grande para jugarlo y todo lo tenían arreglado, al elegir de equipo por lo menos no me habían alejado de tammy, todos nos habíamos separado, estaba por cruzar la esquina de la casa y choque con alguien y disparamos un chorro de pintura.

— ¡Tammy! ¡Me asustaste! — dije al verla.

—¡Tu también rylie! — nos mire y ambas teníamos pintura.

— ¿Nos auto eliminamos?

— No lo sé, estamos en el mismo equipo no lo creo ¿O si?.

— No lo sé — ví que rosalie venía corriendo hacia nosotras — ¡Ah, corre!.

Volvimos a chocar y comenzamos a correr para escondernos había visto la bandera de los chicos y me fui acercando con cuidado y vigilando que nadie viniera al acercarme ví que alguien se acercó tome la bandera y corrí mientras iba disparando hacia atrás, sentí que mojaban mi camisa por la espalda seguí corriendo más duro pero tropecé y me caí rodando por el piso, mire que el que había mojado mi camisa era emiliano, me levanté como pude y volví a correr de un momento a otro tenía al otro equipo detrás de mi mientras yo seguía corriendo esquivando los chorros de pintura que lanzaban, luego mi equipo salió y comenzaron una guerra se nos había olvidado que habíamos ganado, recordé que no traía el pistola de juguete se me había caído cuando estaba huyendo de emiliano. Fui a buscarla y a unirme con ellos, todos estábamos cubiertos de pintura nuestros cabellos también estaban pintados.

Habíamos parado y hablamos un poco, mientras seguíamos lleno de pintura los chicos habían salido a comprar para hacer la comida mientras nosotros los esperábamos en el patio.

—¿Chicas quisiera saber cómo terminaron pintadas ? — dice Matthew.

— Nos habíamos asustado — menciona tammy.

— Si, estába por aquel lado — señaló el lado de la casa — y de repente chocamos y por el susto disparamos.

— Habíamos creído que estábamos fuera del juego.

— Es cierto, yo iba camino hacia ellas cuando rylie grito que corrieran y volvieron a chocar — dijo rosalie con gracia haciéndonos reír.

— ¿Y cómo sabías dónde estaría la bandera? — preguntó Oscar.

— No lo sabía, solo estaba tratando de ocultarme de rosalie, cuando la ví la tomé  le dispare a emiliano escapando de el, cuando rodé por el suelo y segundos después todos me perseguían.

Los chicos llegaron los ayude a preparar la comida para todos juntos a tammy, de uno nos íbamos quitando la pintura y arreglarnos para no dejar restos de pintura en la comida, al estar listos la comida dimos gracias por los alimentos y nos dispusimos a comer. Emiliano nos trajo a mi y a tammy devuelta en casa le agradecimos y nos adentramos a la casa tome algo de ropa me adentre en el baño dándome una di ja para terminar de quitarme algún resto de pintura, un par de minutos después tammy había hecho lo mismos.

— Ya conocí a mi verdadera madre tammy— le mencionó con una sonrisa.

— ¡En serio! — asentí y de inmediato se sentó en la cama — ¿Cómo te fue? ¿Cómo es ella? ¿Que tal se llevan?.

— Me fue bien gracias a Dios, aunque estaba nerviosa al momento de conocerla, tiene el cabello ondulado soy un poquito más alta que ella su nombre es escarlett, nos llevamos bien al principio me incomodaba llamarle mamá así que la llamaba por su nombre, pero hoy cuando la visité le llamé mamá se puso felíz... ¡Hasta conocí a un primo!.

—¡A un primo! — asentí — ¡¿Eso como fué?!.

— Fue una enorme sorpresa tammy, porque estudiamos en la misma universidad, nos tocó hacer un trabajo juntos pero a él no le gusta hablar con nadie, hablábamos muy poco, comenzó a molestarme un poco y un día llegó diciendo que le agradaba, y ese mismo día en la tarde cuando visite a mi mamá nos sorprendimos al decir que éramos primos.

— Vaya conociste a tu mamá y luego a un primo, eso sí es sorprendente rylie.

— Lo se y puedo conocer más de mi mamá atrá vez de el.

— Me alegro mucho que te lleves mejor con el ahora, y de que estés tan feliz por haber conocido a tu madre — sonríe para bostezar un poco — creo que ya deberíamos dormir mañana me seguirás contando.

— Está bien tammy que descanses.