Aitana
Me desperté sobresaltada pensando que me había quedado dormida y llegaba tarde al trabajo, hasta que me acordé que hoy era sábado. Me levanté de la cama y fui hasta la cocina para preparar mi desayuno. Mientras estaba desayunando escuché mi teléfono sonar, así que me levante y fui hasta mi habitación para cogerlo.
Aitana: Si?-dije terminando de tragar el trozo de tostada-
Ana: Hola! Te he despertado?-dice preocupada-
Aitana: No, que va, estaba desayunando. Qué pasa?
Ana: Ah vale. Tú hoy vas a estar por tu casa o vas a salir?
Aitana: Pues no lo sé Ana, por qué? Qué pasa?-digo curiosa-
Ana: Nada, por nada. Es que resulta que Cepeda me ha dicho si me podía quedar hoy con su sobrina y bueno había pensado que igual podíamos quedar y eso
Aitana: Vale, claro. Veniros a casa y así yo aprovecho para recoger y eso. Si eso salgo ahora y compro unos dulces o algo.
Ana: Vale, perfecto! Pues cuando hable con él ya te digo lo que sea. Seguramente que vaya a recogerla a su casa, lo que no sé es la hora
Aitana: Vale, perfecto. Pues cuando sepas algo me dices
Ana: Vale. Gracias bonita!
Aitana: Ana espera!
Ana: Dime, que pasa?
Aitana: Por qué te tienes que quedar con su sobrina? Ha pasado algo o...-me interrumpe-
Ana: No, no ha pasado nada. Es solo que tenía que arreglar una cosa y prefiere que su sobrina no esté por ahí
Aitana: Ah vale...Y te ha dicho que es?
Ana: Aitana, sabes perfectamente lo que es, pero yo no te voy a decir nada. Eso lo aclaráis ustedes cuando se vean. Te dejo que tengo que hacer cosas. Luego nos vemos!
Y apenas me dejó despedirme que ya había colgado, dejándome ahí más confundida de lo que me había despertado. ¿ Acaso era lo que yo pensaba? ¿Acaso iba a hablar realmente con su novia? Bueno ya está, Aitana céntrate que tienes que hacer muchas cosas y apenas has desayunado a las 10:30 de la mañana.
Terminé de desayunar y fui a comprar algunas cosas que me hacían falta y también algunas cosas para esta tarde. Cuando salí del supermercado me paré en el banco para sacar dinero y ya me fui de nuevo a mi casa. La verdad es que se me había pasado la mañana volando, ya eran las 12:30 pasadas. Como todavía era pronto para hacer de comer, tras guardar todo lo que había comprado, fui a mi habitación y me puse ropa cómoda para estar por casa, puse música en el altavoz y comencé a limpiar la casa, ya que los domingos era cuando aprovechaba para limpiar más a fondo.
Cuando terminé de limpiar el salón decidí parar, pues ya era buena hora para comer, pero apenas me dio tiempo de llegar a la cocina pues estaban llamando al timbre. Antes de abrir mire mi móvil por si era Ana, pero no tenía ningún mensaje de ella, así que no tenia de idea de quién era. Al mismo tiempo que abría la puerta se abrió mi boca y junto a ella mis ojos, pues no me creía tenerlo allí delante.
Aitana: Pero tú que haces aquí?!-le dije saltando y abrazándome a él como un mono-
Raoul: Monito! Cuanto te he echado de menos!
Aitana: Jo y yo a ti también. Pero y esto? Cómo es que has venido?
Raoul: Bueno, el otro día me dijeron que tenía que venir a Madrid por trabajo y como hace mucho que no te veo, pensé que igual sería buena idea darte una sorpresa
Aitana: Por dios! Pues claro que sí. Es más, si no hubieses venido a verme me hubiese enfadado demasiado-le digo riéndome- Bueno pasa, justo iba a hacer de comer? Tú has comido? Si no has comido me puedo vestir y salimos a comer. Yo iba a hacer una ensalada y unas pechugas a la plancha, pero si no te apetece hago otra cosa
Raoul: Aitana por dios respira. No, no he comido, y me parece genial lo que ibas a hacer, no hace falta que vayamos a ninguna parte.
Aitana: Vale! Pues deja tu maleta en la habitación de invitados, es aquella de allí, porque te quedas no?
Raoul: Bueno, realmente solo vengo para tres días, así que me había mirado u hotel que hay cerca de donde tengo que estar y –se ve interrumpido por Aitana-
Aitana: No te vas a ir a ningún hotel, ni de broma. Tú te vas a quedar aquí conmigo, así que ya puedes ir cancelando la reserva o lo que sea que hayas hecho.
Raoul: Aitana que no quiero molestar, de verdad, además que ya lo he pagado y voy a ir solo para dormir, por la mañana y por la tarde podemos quedar
Aitana: Bueno vale, pero hoy pasas el día conmigo, vale?
Raoul: Perfecto-dice sonriendo-
