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POV Vegetta.

Mi cabeza dolía. Faltaban diez para las siete así que me apresure para darme un baño y arreglarme.
Los sábados había junta en el consejo  y no podía llegar tarde, era la cabeza.
Cinco para las ocho y ya estaba ahí, todos me miraron con un poco de disgusto.

—Te encanta llegar tarde, ¿Verdad?—Frank dijo entre risas.
—En mi defensa, aún faltan cinco minutos.

Auron, el coordinador de las reglas, se levantó de su asiento y se puso en la punta de la mesa bajando una gran hoja de papel con gráficas.

—Desde que los queridos neutros llegaron hace específicamente dos meses con una semana, las reglas han ido bajando, ¿Me pueden explicar por qué? —Su "apuntador" lo empezó a mover con frustración sobre la hoja.
—Luzu está enfermo, él es nuestro prefecto.— Alex dijo.
—¿Que haremos al respecto? — aventó el apuntador sobre la mesa.
—Creo que deberíamos suspender como mínimo tres semanas.— Frank levantó su mano.
—Las reglas deberían ser más estrictas y con castigos más fuerte, sobre todo lo de relacionarse con otros colores.—Auron remato.

Todos los presentes levantaron sus manos en forma de aprobación al igual que yo.

—Solo hay un problema...
—¿Cuál, vegetta?,
—Bese a otro color no hace tanto. No me arrepiento de nada y no pediré disculpas. ¿Se aplicará esta regla para mí justo ahora?

Todos se miraron entre ellos. Frank lo miro con gracia y su risa era enorme mientras me decía “Grande, macho”.

—No se aplicará. Tienes que aplicar los exámenes de regularización mañana.— Auron levantó su mano.

Me salve por una mano.

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—¡¿Te gusta un blanco?!—Grito con la boca llena.
—No seas asqueroso, por dios.—Le di una servilleta para que se tapara la boca.— Es solo diversión.
—Nunca te habías divertido con otro color.
—¿Qué te puedo decir? Me llaman el rompegetta de las reglas.
—¿Puedo saber quién es la chica?
—Je.. es un chico.

Se levantó del pasto y empezó a dar vueltas mientras tomaba su cabeza.

—¡¿De qué me he perdido?!¡Que solo me fui el principio del año escolar.
—Casi tuvimos sexo en la fiesta de ayer.

Se dejó caer y dió un grito.

—¿Y qué pasa con Willy?—se acomodo.
—Fui su experimento... Es su culpa ahora un chico está en mi mente.
—¿Se quedó con la chica del concierto?
—Si...

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Nuestros colores.  {Rubegetta} 📌EN CORRECCIÓN📌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora