Aquila y Cedric están enamorados, pero el amor ha decidido desquitarse con ellos.
¿Me seguirás queriendo, cielo, cuando sepas todo lo que nos espera? ¿Me cogerás la mano, aunque sea por última vez?
✯ Cedric Diggory x fem!oc
✯ Enlazada con "Boulever...
«Donde nuestras voces suenan, ven a buscarnos, que sobre la tierra no se oyen nuestros cantos».
Aquila llevaba un tiempo intentando adivinar el significado de la canción del huevo dorado, la pista para la segunda prueba. Llegó a la conclusión de que lo que cantaba eran sirenas y que, por lo tanto, debería adentrarse en el agua.
La solución más convincente era el Lago Negro, por lo que adivinó que la segunda prueba tendría lugar ahí.
«Nos hemos llevado lo que más valoras, y para encontrarlo tienes una hora».
¿Qué era lo que Aquila más valoraba?
Cerró los ojos, y la imagen de Cedric y ella recostados bajo la sombra de un árbol le vino a la mente. Vio cómo Cedric le leía la lección de Historia de la Magia, sus labios moviéndose recitando las palabras del libro de texto. Pero ella solo pensaba en cuánto anhelaba besarlos en ese momento, y para siempre.
Entonces lo supo; las sirenas se llevarían a Cedric. Debía averiguar cómo respirar bajo el agua.
«Pasado este tiempo ¡negras perspectivas!, demasiado tarde, ya no habrá salida».
Haría falta más que unas simples sirenas para arrebatarle a Cedric.
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24 Febrero 1995
El aire limpio inundó sus pulmones cuando su cabeza salió por fin a la superficie, respirando con fuerza el oxígeno. Cedric, a su lado, escupió un poco de agua.
—Veo que soy tu persona más importante —le dijo después de toser.
—Claro que sí, idiota —le contestó Aquila con ironía, sonriendo de costado.
Acercó su rostro al de Cedric y le dio un corto beso en los labios, provocando más aplausos y vítores por parte de los espectadores.
—Sabes que tú también lo eres para mí —le aseguró Cedric.
Entusiasmados, ambos nadaron hasta la orilla, donde rápidamente la señora Pomfrey les atendió.
Aquila no tenía claro si lo había conseguido a tiempo o no, pero había sido la primera, por lo que debería obtener la mejor puntuación. No podía dejar de sonreír, abrazando a Cedric, juntándose bajo sus mantas.
Fleur Delacour ya había salido, antes que ella, pero no había logrado completar la prueba. Los grindylows la habían atrapado.
El siguiente en emerger del agua fue Viktor Krum, que regresó junto a Hermione Granger, amiga de Potter. Viktor había intentado convertirse en un tiburón, y su transformación, aunque incompleta, había dado buen resultado.
Cuando Potter regresó, no lo había hecho únicamente con su mejor amigo, Ron Weasley, sino que también traía consigo a la hermana pequeña de Fleur.
A Aquila le pareció que tan solo había querido hacerse el héroe para ganar más puntos, pues cuando ella había llegado donde tenían a los cuatro, Harry ya se encontraba ahí. Aquila le había mirado extrañada, puesto que ya había soltado al chico pelirrojo, pero no se movía de ahí. No le dio demasiada importancia y salió lo más deprisa que pudo del lago.
Por supuesto, Fleur se lo había agradecido, y los chicos casi se desmayaron cuando ella les dio dos besos.
El gran gesto de Potter le molestó, pero se consiguió olvidar de ello cuando Ludo Bagman comenzó a decir los resultados. Después de Fleur, llegó el turno de Aquila.
—La señorita Black, que también ha utilizado el encantamiento casco-burbuja, ha sido la primera en volver con su rehén, aunque lo hizo un minuto y medio después de concluida la hora.
Aquila se mordió el labio inferior con nerviosismo. Cedric la apretó entre sus brazos, dándole apoyo.
—Por tanto le concedemos cuarenta y seis puntos.
Abrazó muy feliz a Cedric y volvió a besarle.
Cuando llegó el turno de Potter, ya se esperaba que le dieran puntos extra por salvar a Gabrielle. Pero, ahora, ellos estaban empatados en el primer lugar.
Mientras caminaba de vuelta al castillo, le dio la mano a Cedric. Él se paró en uno de los pasillos, en las mazmorras, antes de que tuvieran que tomar caminos distintos para llegar a sus salas comunes.
—Lo decía en serio, eres lo más preciado que tengo —garantizó Cedric, con los ojos clavados en el rostro de Aquila—. Siempre serás alguien importante para mí.
Ella sonrió y dirigió la mirada al suelo, contemplando sus zapatos, antes de subirla y mirar directamente a sus ojos. La sonrisa se tornó pícara y a Cedric se le contagió. Así que agarró su mano y corrieron juntos por el pasillo, rumbo a un lugar apartado.
El tic tac del reloj se escuchaba en la distancia como un ruido amortiguado, formando parte del ambiente desde que el Cáliz de Fuego había expulsado el nombre de Aquila. El tiempo corría.
Durante unos segundos, pareció pararse para los dos jóvenes enamorados.
Pero no fue así, porque el reloj seguía avanzando.
btw, yo amo a Harry y sé que no quería hacerse el héroe, pero pues Aquila sí vaya. la verdad es que no le cae muy bien, estoy segura de que tiene alguna insignia de «Potter apesta»
