6

4.8K 629 295
                                    

Renuncia de derechos, los personajes que salgan aquí son de sus respectivos autores.

"Realmente no me gusta vestir esto"

La voz de Goku quejándose se hizo presente y Uraraka abrió sus ojos bastante sorprendida al ver el traje oscuro que vestía el pelinegro.

-¿Qué ocurre Uraraka-san? -preguntó Momo caminando hasta la puerta y sus ojos se abrieron de par en par al ver al azabache.

-Hola Uraraka -saludó el muchacho sonriendo de forma cordial- supongo que tu debes ser Momo ¿no? Un gusto, soy Goku, espero que podamos ser amigos -añadió estrechándole la mano-

Momo carraspeó ligeramente, saliendo del estado de puro anonadamiento al que se había sometido al ver a Goku vestido de esa manera y le correspondió el saludo tranquilamente.

-Oye Hatsume-san -habló Uraraka golpeando suavemente su codo en el costado de Mei- ¿sabes porqué Goku-san va tan elegante?

-Claro, fui yo quien eligió el diseño -respondió Mei con una pizca de orgullo- lo más difícil fue poner gel a su cabello, es bastante indomable.

-Ya veo -dijo Uraraka con simpleza, llevándose la mano a su nuca y sonriendo nerviosamente.

-Yaoyorouzo-san, este es un amigo de Goku -habló la chica de cabello rosa señalando a Izuku.

-H-hola soy Izuku Midoriya, un gusto -se presentó tímidamente el peliverde estirando su brazo para saludar a la azabache.

Para alguien como Izuku, que habría sufrido de acoso y discriminación gran parte de su vida, era normal estar algo nervioso delante de cualquier persona, y sobretodo si era una hermosa chica como lo era Momo Yaoyorouzo.

Momo vestía un vestido de gala color negro puro junto a unos tacones del mismo matiz oscuro.

Mei por su parte iba con una camiseta negra junto a una chamarra azul y unos pantalones negros. Eligió ir de una forma sencilla.

-Un gusto Midoriya-san -saludó Momo formalmente correspondiendo aquel saludo.

-S-supongo que ahora podemos entrar, ya está lista la cena -añadió Uraraka con una sonrisa.

-¡Genial! -exclamó Goku saltando con cuidado, Mei le habia dicho que no hiciera movimientos bruscos para evitar que se rompiese el traje.

Así, Uraraka les guió al interior de la casa para poder disfrutar de la cena entre todos.

Más tarde.

La cena había transcurrido con éxito y normalidad para todos. Mei tuvo que golpear varias veces a Goku con su pie para que pudiera comer de una manera más civilizada. Estaban en un lugar público y no entre ellos dos.

El señor Yaoyorouzo y el señor Uraraka se habían puesto a hablar de asuntos laborales y de las elevadas tasas de inflación que aplicaban a la maquinaria que compraban para la empresa.

La madre de Uraraka y la de Momo comenzaron a conversar del último escándalo que salpicó a un famoso director de cine con una joven actriz.

Así que Uraraka condujo a sus nuevos amigos hacia su cuarto para que pudieran dialogar a gusto y sin molestias de cualquier tema.

-Vaya Uraraka-san, tienes una habitación bastante hermosa -halagó Mei admirando aquel cuarto con una sonrisa en sus labios.

El cuarto era simple y de tamaño mediano: había una cama a un lado, un ropero, una estantería de libros y una mesita de noche junto a la cama.

Las paredes estaban pintadas de fucsia y habían algunas fotografías de Uraraka y su familia.

-¡G-gracias Hatsume-san! Pero ni siquiera está decorada, realmente no soy buena en eso -habló Uraraka sonriendo nerviosamente.

TravesíaWhere stories live. Discover now