𝐢

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"Jisuuunng~"

"Jijiii~"

"Sungiiieee~"

"Han Jisung, saca tu gordo trasero de la cama."

Jisung despertó sobresaltado por el repentino cambio de tono de Felix, su voz se había convertido en una muy baja y grave.

El somnoliento chico rascó sus ojos con sus muñecas mientras bostezaba. "¿Qué hora es, Felixie?"

El rubio rodó los ojos. "Las ocho de la mañana, la misma a la que te despierto todos los días. Ahora levántate y apresúrate en prepararte, tengo clases."

Felix se marchó de la habitación para que Jisung se pudiera cambiar en privado. Ya se habían visto desnudos antes, al fin y al cabo eran amigos, pero Jisung seguía odiando mostrar su cuerpo a alguien más.

Después de haber limpiado todas sus legañas, Jisung salió de la cama y buscó en su armario algo cálido. Todavía era otoño pero se conocía, con la más mínima brisa de aire ya estaría tiritando.

Finalmente escogió una sudadera roja (que posiblemente se la hubiera robado a Hyunjin) y unos pantalones claros con roturas a la altura de las rodillas, se acomodó el cabello y fué arrastrando sus pies hasta el salón, en busca de sus vans.

"Felix, ¿has visto mis vans?" Preguntó el de pelo castaño mientras miraba debajo de la mesa.

"¿Cuáles?"

Jisung bufó y caminó pesadamente hacia la cocina. "Las lisas y negras. Las llevé puestas ayer." Se quejó, molesto por haber perdido otro par de zapatos, ya era el tercero de esta semana.

"¿Buscaste en el baño? Mientras estás ahí puedes arreglar eso." Dijo haciendo una mueca de desagrado en broma al ver la cabeza del mayor. Jisung solo sacó su lengua antes de ir a la habitación mencionada.

Ahí estaban, sus preciados zapatos estaban al lado de la ducha. Se calzó rápidamente, el pequeño chico se acercó al espejo para poder inspeccionarse.

Su cabello castaño estaba despeinado por todas partes en pequeños y suaves rizos y su maquillaje del día anterior estaba corrido. ¿Qué podía decir? Estaba cansado ayer por la noche. Estudiar sacaba mucha energía de un chico tan pequeño.

Después de arreglar su peinado y quitar el maquillaje que había llevado ayer, Jisung decidió no arreglarse más y salir con la cara al natural. No era que fuera a conocer a su alma gemela, solo iría a un café con un amigo.

Oh boy, estaba muy equivocado.



oh boy! | minsungOnde histórias criam vida. Descubra agora