oh boy! | minsung

𝐱𝐯𝐢𝐢𝐢

"¿Le hablaste de tus padres?"

Minho rodó sus ojos. "Sí, Hyunjin."

"¿Y él te habló de Jaebum?"

"Sí, Hyunjin."

"No me lo puedo creer."

Minho rio y le pegó un golpe a la frente de Hyunjin. El menor hizo un puchero y acarició el lugar del impacto.

"Así que, ¿ahora sois novios?"

Minho frunció el ceño. "Uh, no lo sé, ¿supongo que sí? No le pregunté formalmente, pero pensé que después de haber ido a una cita-"

"Lee Minho, ¿eres estúpido?" Hyunjin lo interrumpió con fuerza. "Dios, sabía que eras idiota, pero esto es demasiado." Sacudió su cabeza decepcionado.

"No es importante. Él me gusta, yo le gusto. Creo que tenemos todo lo que importa."

"Sí, sí, eso es importante y todo lo que tú quieras, pero lo que de verdad importa es que debes planear algo bonito y cursi para declararte a tu bebé. Jisung adora que sean románticos." 

"Bueno, ¿y qué se supone que debo hacer?" Bufó Minho, cruzando sus brazos, no era un gran romántico que digamos.

"Cómprale bombones, ¡no, espera! ¡Cómprale un peluche! ¡Haz las dos cosas! Y preséntate sin avisarle, que todo sea una sorpresa."

"No lo sé..." Minho era muy malo en el romance.

"Solo hazlo, Minho, ¿quieres que Jisung sea tu novio o no?"

"Está bien."

Y por eso Minho se encontraba en frente del apartamento de Jisung, sus brazos estaban cargados con peluches y varias cajas de bombones, eran las dos, las dos de la mañana para ser exactos.

Hyunjin había insistido en que debía llegar en medio de la noche, para que la sorpresa fuera aún mayor. Minho pensaba que era estúpido, pero Hyunjin no dejo que se fuera hasta que el reloj marcó 01:45

Se llenó de confianza y haciendo malabares con su cuerpo, para no tener que soltar ningún regalo, llamó a la puerta.

Esperó por lo que parecieron horas hasta que la puerta se abrió lentamente, Jisung lo recibió con sueño y con  el cabello alborotado.

Minho se fijó en el peluche de ardilla que estaba en la mano de Jisung mientras que este se frotaba los ojos.

"¿Minho? ¿Qué haces aquí?" Murmuró Jisung y Minho sonrió al darse cuenta de que no había tartamudeado.

"¿Quieres ser mi novio?"

Minho era extremadamente malo en el romance.

El chico de pelo azul parecía haber despertado de golpe, sus mejillas se sonrojaron y sus ojos se abrieron completamente.

"¿N-Novio?" Y el tartamudeo estaba de vuelta.

Minho sonrió levemente y dio un paso hacia adelante, enseñando los regalos que había traído. "Sí, incluso te he traído peluches y bombones."

Jisung sonrió de manera gingival, saltando hacia Minho, haciendo que esté lo agarrara y dejara caer los regalos.

"¡Claro que seré tu novio, Minho!"

Y de nuevo el tartamudeo se había ido.