oh boy! | minsung

𝐯𝐢

"Así que, ¿vas a mandarle un mensaje a Jisung?"

Minho despegó la mirada de sus libros y llevó sus ojos hasta su amigo.

"Hyunjin, ¿estás bromeando? Acabo de conseguir su número, ¿por qué debería mandarle un mensaje ahora mismo?" Dijo Minho, como si fuera la cosa más obvia del mundo.

Hyunjin no lo entendía.

"¿Por qué no?" Preguntó, rodando en la cama del mayor. Minho ya lo regañaría más tarde por deshacerla.

"Oh, Hyunnie, mi niño." Dijo Minho dramáticamente. "Si le mando un mensaje justo al momento me hará lucir desesperado, cosa que no soy. Si hago que espere un poco, pensará en mí por una semana." El mayor sonrió y volvió a sus estudios, pensando que la conversación había acabado.

"Minho, esa es lo más estúpido que he oído nunca."

Está bien, la conversación no había acabado.

"Jisung no es como esos chicos con los que has coqueteado sin rumbo fijo y luego has dejado sin más. No creo que haya tenido un novio antes. No puedes jugar con él, no te dejaré."

Minho miró a su amigo, preguntándose de donde había salido todo eso. Personalmente no creía que fuera una persona que jugara con los sentimientos del resto, bueno, había coqueteado con todo el mundo que consideraba que valía la pena, pero no era como si se acostara con todos. Simplemente le gustaba divertirse.

"V-vale, Hyunjin. Le mandaré un mensaje cuando acabe de estudiar."

El menor solo gruñó en respuesta antes de dejar la pequeña habitación.

Solo en su habitación, Minho cerró sus libros y se giró hacia su espejo, juzgándose a sí mismo.

¿Todo el mundo pensaba que era un playboy? ¿Lucía como uno? Pero más importante, ¿Jisung pensaba que lo era? Minho trató de no pensar en eso mientras agarraba su chaqueta vaquera de su armario y se dirigía el salón.

"¿Has visto mis llaves?" Le preguntó a Hyunjin, quien estaba jugando a un videojuego en la televisión.

"¿Uh, no?" Realmente Hyunjin no le estaba prestando atención.

Minho rodó los ojos, encontró sus llaves mientras caminaba hacia la entrada. "Cuando Chan vuelva dile que he ido a la tienda."

El menor prácticamente no lo conocía y Minho rio mientras salía de su apartamento, sacando su teléfono para mandar un mensaje.

Minho
¿No me habrás dado un número falso?