12:༄*ೃ𝘴𝘢𝘯𝘥𝘺 𝘭𝘰𝘷𝘦⋅🧃°

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♡Hola vengo a decirles que escribí esto mientras escuchaba Our Summer y Sweet Night, y es una de las experiencias más lindas, espero que disfuten leyendo esto tanto como yo escribiendolo♡

La blanquecina y reluciente luna iluminaba la cálida noche, acompañada por la inconmensurable cantidad de estrellas que en el oscuro azul del cielo se encontraban, la brisa veraniega impactaba levemente contra los rostros de los jóvenes, que con inmensas sonrisas, ingerían aquella fría sustancia y reían al unísono, mientras que eran acompañados por las bellas melodías provenientes del reproductor de música.

-Pon lo que quieras-

-Está bien-

Tomó el reproductor y comenzó a pasar canción por canción, hasta que encontró aquella que formaba tanto parte de su pasado, como de su presente, sin pensarlo dos veces le dió play, comenzó a sonar la lenta melodía, a lo que el rubio se acostó en la manta sobre la blanquecina arena, y con la mirada perdida en algún lugar del cielo comenzó a susurrar la tan tranquilizante letra.

-I was a quick wet boy
Diving too deep for coins..-

-All of your straight blind eyes
Wide on my plastic toys-

Al mirar a su lado, se encontró con un peliazul, exactamente en la misma posición en la que el se encontraba, sus ojos azabaches recorrían todas y cada una de sus facciones.

-Then when the cops closed the fair
I cut my long baby hair-

-Stole me a dog eared map
And called for you everywhere-

Ambos se miraban como si de la joya más preciada se tratase, todos sus sentidos estaban fijos en el otro, y casi sin quererlo, casi sin pensarlo, con almas nerviosas y felicidad a flor de piel, comenzaron a cantar al unísono.

-Have I found you?
Flightless bird, jealous, weeping
Or lost you?
American mouth
Big bill looming-

Beomgyu fue el primero en darse vuelta, hasta quedar frente a frente con el más alto, sus instintos rogaban por el calor del contrario, por sentir su cercanía. Sus ojos, tan perdidos en los de este, simplemente lo hundían cada vez más en su mundo, Yeonjun, tímidamente tomó entre sus dedos la mano del contrario, y con sumo cuidado lo acercó hacia él, en cuanto lo tuvo frente a frente, nariz con nariz, se sintió completo, feliz, podía sentir la calidez dentro de su cautivado corazón, podía ver la pureza del alma que habitaba en el rubio frente a él, fue allí cuando finalmente entendió que, solo tenía ojos para una persona, que solo aquel pequeño rostro era el que lograba hacerlo sentir en las nubes, que derrepente, no era la gravedad quien lo sostenía, sinó que ahora lo era aquel pequeño malhumorado, con pequeñas tendencias narcisistas, al igual que el, con inocentes y redondos ojos color avellana, color otoño, no lograba comprender que era todo aquello revoloteando en su estómago cuando finalmente sus labios se posaron en la punteaguda nariz del rubio, pero si de algo estaba seguro, era que no quería que aquel cosquilleo en su estómago terminara.

-Eres una persona cursi, ¿Lo sabías?- Acotó el rubio, que instantáneamente se aferró al cuello de el contrario.

-¿Y es eso un problema?- Respondió este, posando su frente sobre la del contrario.

-Que te hace más único e irrepetible, y no se que haré el día que vuelvas a tu hogar, puesto que no encontraría a nadie como tú..- Confesó el rubio bajando levemente su cabeza.

-Oye..no quiero verte triste, me lo prometiste, ¿Lo recuerdas?-

-Rompí todo acuerdo cuando estaba empapado en agua del lago- Ambos rieron tristemente al unísono.

-Tiene sentido..pero me duele verte así, tonto, ya deja de hacerme sufrir- Añadió este para luego formar un pequeño puchero.

-Dame razones para no hacerlo-

-¿Mi simple presencia no te basta?-

-No- Respondió seco, aunque mantenía una pequeña sonrisa en su rostro.

-Tal vez..¿Querrías quedarte a dormir aquí?-

Beomgyu simplemente quedó estático, sus mejillas ardían, pero obviamente no rechazaría tal oferta.

-Con eso me basta- Añadió casi en un susurro, para luego plantar un beso sobre los suaves labios del peliazul.

-Eres hermoso- Confesó el más alto en cuanto sus ojos recorrían cada sitio de la brillante iris del rubio.

-Tú lo eres-

Justo en ese momento, la tranquilizante balada que de fondo sonaba, fue remplazada por la ruidosa introducción de  What I've Done, que al escucharla tan repentinamente, simplemente casi les da un ataque, y rieron al unísono al darse cuenta de esto.

-¿Te gusta Linkin Park?- Preguntó incredulo el rubio.

-¿Y a tí que te parece?- Dijo con obviedad en su voz, a lo que el más bajo simplemente resopló.

Puesto que el ambiente estaba demasiado calmado, o por lo menos a los ojos de Yeonjun, este se quitó los zapatos, y dirigió lentamente su paso hacia la arena que permanecía mojada, para luego introducir los pies en el agua, casi tan fría como la misma nieve, Beomgyu al verlo, simplemente siguió sus pasos, hasta llegar junto al peliazul.

-¿Qué haces?-

Dicho esto, el más alto, retrocedió hasta la orilla, bajo la atenta mirada del rubio, hundió sus dedos y palma de sus manos sobre la arena mojada, para luego agarrar un puñado de esta.

-Divertirme-

Sin previo aviso, sin contexto alguno, arrojó el puñado de arena en dirección del rubio, impactando directamente con su chaqueta, y causando una gran mueca de indiganción por parte de este.

-¡Eres un idiota!- Dijo este, tomando entre sus manos un gran puñado de arena mojada, atentando esta vez contra la espalda del peliazul.

Y asi, estuvieron una media hora, lanzando y recibiendo a cambio pequeñas porciones de arena, de un instante al otro, ambos habían terminado dentro del mar, empapados hasta la cabeza, con la fría brisa sobre sus blanquecinos cuerpos, logrando que pequeños castañeos de dientes se hagan presentes, pero eso poco les importaba. Lentamente salieron del agua, llegaron hasta la seca arena, Yeonjun fue el primero en tirarse de espaldas sobre esta, siendo aplastado por el pequeño cuerpo del rubio segundos despues, estaban cara a cara, empapados, rellenos de arena en lugares inimaginables, ambos sin camiseta debido a la incomodidad que les provocaba dentro del agua, y con las mejillas pintadas de un carmesí intenso, debido al largo tiempo que habían corrido sobre la arena, sin contar que las risas obstruían sus pulmones, causando que estén cada vez más agitados, si duda estaban simplemente rendidos.

-Creo que tienes un pequeño problema con empujarme a lugares mojados-

-Lo haré las veces que sea necesario-

-¿Necesario, Yeonjun? me bañe hace apenas dos horas, idiota- Refunfuñaba el rubio.

-Oye, deja de insultarme-

-No lo haré, me empujaste al mar, no dejaré que lo hagas otra vez, tengo arena en mi ropa interior-

-Si, definitivamente yo también, y lamento decirte que te empujaré a otro lugar mojado-

-Espero que sea la ducha-

-Le acertaste, ¿Vamos?-

Dicho esto, ambos se levantaron y recogieron lentamente las cosas que habían dejado en la playa, hasta quedar frente a frente en el umbral de la puerta, Beomgyu miró fijamente al peliazul.

-Este fue uno de los mejores días de mi vida- Dijo con una sonrisa dibujada en su rostro.

-¿Sabes una cosa?-

-Dime-

-El mío también..- Añadió, dejando un delicado y significativo beso sobre los labios del rubio.

୧ *·˚ ʲᵘˢᵗ ᵃⁿᵒᵗʰᵉʳ ˡⁱᶠᵉ┆↰ 𝘠𝘦𝘰𝘯𝘎𝘺𝘶Where stories live. Discover now