Capítulo 15: ¡No, no y NO!

855 113 124
                                    

Luego del desastre de esa mañana, pasar seis horas en el automóvil con Dean era impensable, por lo que Cas prefirió regresar con Sam en el Cadillac.

—Así que... las cosas no salieron bien con Dean, ¿eh? —se aventuró a indagar Sam luego de algunos kilómetros. Ambos habían estado muy silenciosos durante el desayuno en casa de Jody y eso no podía ser buena señal. Castiel suspiró con fuerza y se echó hacia atrás, como esperando que el asiento se lo tragara.

—No quiero hablar de eso —dijo con un hilo de voz.

—¿Tan mal?

—Prácticamente me abalancé sobre él... —dijo Cas consternado—... y me rechazó. —Sam apretó los labios al escuchar aquello y murmuró "Lo lamento"—. No sé qué esperaba. Era obvio que algo así iba a suceder. Creo que ya es hora de aceptar que jamás sucederá. Nunca lograré que me vea con otros ojos. Y sospecho que arruiné las cosas entre nosotros.

—¿Se enfadó?

—No, es solo que... —Cas sonaba más desesperanzado que nunca y Sam no sabía qué decir para animarlo—. Le dije que quería hacerlo por Claire, pero sospecho que sabe la verdad y que sencillamente no está interesado. Dijo que no quería ayudarme a fijar el encantamiento porque "mi nueva apariencia lo incomoda". —"¿Cómo dices?" preguntó Sam desconcertado, sacando por un momento la vista del camino—. Dice que le resulto demasiado atractiva con esta forma, de un modo "sobrenatural"; como si fuera parte del encantamiento. No sé si eso es cierto, o es solo una excusa. Como sea, no quiere nada conmigo...

—Yo podría hablar con él...

—No creo que sirva de nada —dijo Castiel volteando para mirar por la ventanilla, dando por terminada la conversación.

***

Para cuando Sam y Cas llegaron al búnker, el Impala ya estaba aparcado en el garaje.

Dean no se hallaba en la cocina y Sam supuso que lo encontraría en su cuarto. Sacó dos cervezas de la nevera y caminó por el pasillo de las habitaciones hasta su puerta. Golpeó con suavidad y abrió antes de escuchar una respuesta.

—Ey, Dean —dijo asomándose con cautela. Su hermano estaba sentado en la cama, mirando la nada y solo pareció reaccionar al escuchar su voz.

—Ey, Sammy —lo saludó como un eco apagado.

—Cas me contó lo que sucedió... —dijo el Hombre de Letras dándole una de las botellas, tomando asiento en el borde de la cama.

Dean aceptó la ofrenda y dio un sorbo. Mientras tomaba frunció el entrecejo pensativamente.

—¿Desde cuándo son tan amigos ustedes dos? —Sam suspiró molesto—. Olvídalo. ¿Te dijo que intentó besarme? —resopló con irritación, le dio otro trago a su cerveza y continuó hablando—. Dijo que quiere quedarse así por Claire. ¿Puedes creerlo?

—Bueno, Dean, ellos han pasado por mu- —pero Dean lo interrumpió soplando una risa sarcástica.

—¡Ese no es motivo para querer cambiar de este modo! —dijo exasperado—. Si esa niña no puede aceptarlo como es, no merece que... —Dean no terminó la idea. Debía tranquilizarse o acabaría revelando algo que no quería. Alzó la botella y la bebió hasta la mitad—. ¡Cas no tiene que cambiar por ella! ¡Ni por nadie!

—Dean... —dijo Sam en un tono calmado, intentando tranquilizarlo—... Es solo un recipiente, a Cas no le importa cómo luce...

—Justamente, Sam —dijo testarudo—. Es solo un recipiente y debería ser capaz de aceptarlo tal y como es.

Hechizando Rápido y Fácil Con Madame GreenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora