Voy a buscarte (NaLu)

Salamander

Este capitulo se a quedado bastante corto pero prometo que compensaré con el siguiente >__<

Narrado por Igneel

Ha pasado una semana desde que llegué a Fairy Tail y Salamander no había a parecido por el gremio aún.

Desde que llegué veo a magos entrar y salir con misiones, cada una de ellas muy diferente de la anterior, todos los magos parecen muy poderosos estoy seguro de que cualquiera de ellos sería capaz de salvar a mama, sin la ayuda de Salamander, no obstante si el tio Loke me insistió tanto en que debe ser Salamander, es por algo.

A Laxus, el maestro del gremio le estoy muy agradecido ya que no le importa que este todo el día aquí aunque no forme parte del gremio. Erza ha intentado averiguar él porque insisto tanto en ver a Salamander, ellos seguramente son muy cercanos y por ello tiene tanta curiosidad. Lisanna no ha vuelto a acercarse a mí, creo que está enfadada por el trato que le di. Mirajane me ha acogido en su casa, la casa del maestro, durante estos días, la verdad es que me llevo muy bien con su hijo Takumi y con su otra hija, la pequeña Miyumi, ella es muy amable conmigo a pesar de no conocerme de nada, todos dicen que esa familia da miedo pero yo me he sentido muy cómodo todos estos días.

Hoy están todos reunidos en el gremio, ninguno ha salido a hacer alguna misión, todos han decidido permanecer hoy aquí.

-Al fin, el ansiado momento –Me dice Jellal, el marido de Erza poniendo su mano sobre mi gorro.

Por algún motivo él y su hijo mayor comparten nombre, no he preguntado el motivo pero probablemente sea debido algo, esas cosas en los libros que he leído nunca las hacían porque sí, siempre había algún motivo oculto.

Las puertas del gremio se abren, dejando ver a un tipo encapuchado y a un pequeño gato azul.

El encapuchado se adentra en el gremio en absoluto silencio y sin saludar a nadie acompaña a su gato, Happy, como los del gremio me dijeron que se llama, a la tabla donde se encuentran las misiones.

-Natsu –Gray le llama. Salamander se retira la capucha y con una seria expresión mira a su amigo– No me mires así, ven te quiero presentar a alguien.

Gray le coge por la capucha, arrastrándole y lo lleva a la mesa donde se encuentra Juvia con un bebe en sus brazos, Sayumi y Grey, sus otros dos hijo.

-Natsu-san es una niña –Juvia se levanta y al ver la expresión de Natsu la deposita sobre sus brazos, dejando que el mago de fuego la cargue con sumo cuidado.

-Es preciosa chicos –Salamander sonríe como un estúpido mientras la pequeña trata de alcanzar uno de los dedos con los que Salamander toca su rostro.

No sé por qué pero esa imagen me molesta demasiado.

-Ve –El maestro me da un pequeño empujón para ir hasta él, el empujón que necesitaba moralmente.

Voy andando hacia él, nervioso pues no sé cómo voy hablarle... ¿Realmente este tipo es el hombre que hizo sufrir a mama?

-Salamander –Le llamo consiguiendo llamar su atención, cuando me mira me quedo callado, no sé cómo decírselo, no sé cómo hablar con él sin que un insulto se me escape. La imagen de mi madre viene a mi mente, cierro mi puño con fuerza armándome de valor y le miro fijamente– Yo...

-Ha venido buscándote Natsu –Le dice Gajeel intentando ayudarme.

Sin embargo, él me ignora y se marcha con su gato.

-Escoge una misión Happy –Le ordena a su gato, después de ver a Lily y Charle no me sorprende ver un gato con alas, aunque tengo que reconocer que me asombró mucho la primera vez que vi uno– No tengo tiempo para entretenerme contigo.

Con cada palabra que sale de su boca mi odio por él crece mucho más.

¿Qué no tiene tiempo para mí? ¿Ni para mi madre? ¿Por qué no se va al maldito infierno de una vez? No, tranquilo Igneel, le necesitamos.

-Te odio Salamander –Al escucharme se voltea, mirándome de nuevo, todos los del gremio están asombrados debido a mi confesión ¿Acaso pensaban que vengo a buscarle por gusto?– Pero...eres al único a quien puedo pedirle ayuda...

-¿Ayuda? Yo no puedo ayudar a nadie en nada, lo siento mucho pero estoy ocupado –Agarra el papel que le trae Happy y se dispone a marcharse de nuevo del gremio, a una nueva misión.

-¡ERES EL UNICO QUE PUEDE SALVAR A MAMA! –Le grito, Salamander se detiene y sin mirarme espera a que yo termine de hablar- Unos tipos la secuestraron, Oración 6 me pareció escuchar.

-¿Oración 6? –Preguntan al unísono, Gray, Erza, Jellal y Wendy.

-Decían, que querían que ella les abriera no sé qué puerta o algo así...

Al fin consigo que me haga caso. Salamander se voltea con sus ojos ampliados, se agacha para estar a mi altura y me coge por los hombros con sus manos temblorosas.

-¿Cómo...? ¿Cómo se llama tu madre? –Me pregunta con un tono desesperado, sus ojos expresan una fuerte preocupación.

-Lucy...Lucy Heartfilia –Respondo asombrado por su reacción.

¿Por qué te preocupas tanto...?

Narrado por Natsu

No, no puede ser ¿Lucy? Mi Lucy, está en peligro, ella está en peligro y yo aquí sin hacer nada.

No sé en qué momento he empezado a correr, voy hacia mi casa seguido por ese niño que dice ser su hijo, recojo mis cosas y me encuentro con él en la puerta, no quiero ver a este niño, pensar que Lucy ha tenido un hijo con otro que no soy yo es algo que no puedo soportar, la he estado buscando durante estos diez años sin descanso, necesito encontrarla tenerla de nuevo a mi lado, quererla y disculparme con ella, que me perdone lo que hice...

-No te preocupes –Le digo para tranquilizarle, si yo estoy alterado por la noticia él quien ha perdido a su madre y ha visto como la secuestraban debe encontrarse en el mismo estado que yo o puede que peor– Voy a salvar a Lucy, sea como sea.

-Nosotros vamos contigo –Detrás del niño aparecen Gray y Erza, yo solo asiento, somos un equipo y juntos rescataremos a el miembro del equipo que nos falta.

Lucy.

-Niño, quédate aquí, en el gremio, volveré con Lucy sana y salva –Al pequeño no parece hacerle mucha gracia que le dé órdenes.

-¡NO! ¡Yo seré quien salve a mi madre! Voy con vosotros –Sus ojos me miran tan decididos que soy incapaz de negarme, no puedo rechazar a alguien con ese espíritu de combate.

-¿Cómo te llamas? –Pregunto agachándome para estar a su altura, debe odiar que le mire desde arriba.

-Jude, Jude Heartfilia –Me responde sin dejar de mirarme a los ojos, como si me retase con la mirada.

Tengo la sensación de que no le caigo bien.

-Muy bien, Jude –Pongo mi mano sobre su gorro y apoyándome en él me vuelvo a poner de pie– Vamos juntos...a salvar a Lucy –Salgo el primero junto a Happy.

Estoy concentrado en lo que tengo que hacer, tenemos una misión, vamos a salvar a Lucy... no, voy a salvar a Lucy pase lo que pase.