Una buena reconciliación.

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***
Se metieron en el coche de Kirishima y éste le llevó hasta una casa baja, de color crema, con una puerta de madera caoba. Sus alrededores estaban cercados por una valla blanquecina, cuyo acceso era una puerta cerrada  con cerrojo y un candado.

Además había césped en torno a ella.

-Kirishima, ¿de quién es esta casa? ¿Y por qué me has traído aquí?

-Esta casa es mía, la compré hace poco para que tuviéramos un lugar donde disfrutar de tiempo a solas. Pensé que sería mejor que ir de hotel en hotel. En cuanto a la segunda pregunta...Sabes muy bien la respuesta~

Bakugou se sonrojó y desvió su mirada pues era ya bastante obvio a qué iban a aquella casa.

***
Una vez que hubieron abierto la valla y la puerta principal, Eijirou encendió la luz. La cual descubrió un modesto recibidor de madera de pino, que encima tenía varias plantas decorativas y, en esa misma pared, un amplio espejo.

También se podían apreciar que las paredes eran de color melocotón, detalle que hacía la casa acogedora.

-Bakugou, ¿quieres ver el resto de la casa?-Le preguntó la verlo curioso.

-Sí, me gustaría verla.

-Bien, acompáñame.

Entonces Kirishima le condujo hasta el salón, el cual se encontraba al poco se avanzar por la casa. Éste era amplio, con un sofá rojo, de apariencia aterciopelada y ancho.

Además había una mesa de madera en el centro que tenía un cristal en medio. En el centro de la pared había una televisión de gran tamaño. Al mirar a la derecha se podía ver un radiador y a la izquierda un gran ventanal.

-¿Te gusta?

-Sí, está bien.

Después le mostró la cocina, que era de color blanco. Desde la encimera hasta los muebles. Era muy amplia pero no tenía ventana.

Después Kirishima le mostró uno de los cuartos de baño, que se encontraba a la izquierda de un largo pasillo. No tenía nada demasiado especial, era un baño de color azul, algo estrecho que contaba con un retrete pero no con ducha.

Sólo poseía ducha el baño del fondo, éste sí que era espacioso y de color gris perla. Una de las pocas diferencias respecto al otro residía en que este era grande.

-Ahora queda lo mejor, el dormitorio.

El pelirrojo abrió la puerta y ante ellos se mostró un amplio dormitorio, de paredes blancas y con una cama muy grande adornada con un edredón de seda color rojo.

-¿Qué te parece la cama?

-Parece cómoda, ¿la probamos?

-Claro~

Entonces acortaron la distancia que había entre ellos y se besaron apasionadamente. Durante el beso, el héroe condujo a Katsuki hacia la cama. El más joven se dejó caer sobre ella.

***
Estando ya sobre la cama; continuaban dándose besos y caricias.

-Nhg... Tengo calor, Kirishima.

-En ese caso, tendré que solucionarlo, ¿no crees?-Dijo con tono sensual.

-Sí, tienes que salvarme del calor, Red Riot~

-Por supuesto, debo cumplir con mi deber de héroe.

Eijirou despojó con rapidez a Katsuki de su ropa.

-Eh, faltas tú también, Red Riot. ¿Debería hacer algo al respecto?

-Como aspirante a héroe que eres, deberías salvarme de este calor tú también.

You can't resist Daddy after all.[Kiribaku]Where stories live. Discover now