20- Te quiero

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Fernando

Me encontraba caminando de un lado al otro por toda mi habitación. Estaba tan sumido en mis pensamientos que ni cuenta me di de que me había puesto el pijama al revés.

Ya había pasado una hora desde que Susan me escribió un mensaje diciendo "tenemos que hablar".

Esas palabras lograron helarme la sangre en un instante, he leído y visto muchas películas, el trasfondo de esa frase no es muy alentador que digamos. Hay tantas probabilidades que me carcomen el cerebro. Puede ser algo bueno, también podría ser algo malo ¿pero malo malo? No lo creo.

Miro el reloj una vez más, ya son las 9:13pm, esta espera me va a matar.

Empiezo a caminar de un lado al otro por quinta vez consecutiva en la noche. Creo que ya mis pisadas quedaron marcadas en el suelo por pasar tantas veces sobre el mismo lugar.

Ahora que recuerdo no he cenado aún, pero no me provoca tampoco, siento que tengo un nudo en la garganta que a duras penas me permite pasar saliva. Además, mi hermano no me ha llamado, así que supongo que no ha cocinado nada.

Salgo un instante al balcón, el frío viento acaricia mi rostro con sutileza, mueve mis desordenados rulos trayéndome algo de paz. Noto como varios edificios se encuentran casi apagados en su totalidad, además muy pocas personas transitan por las calles, bueno, es normal, ya es tarde, además el que sale lo multan con una cifra muy elevada.

Ahora que lo pienso ¿cómo hicieron Isaac y Jenifer? Hasta donde sé esa tal Martina vive un poco lejos de aquí. No puedo creer que hasta ahora analizo ese detalle, fue demasiado peligroso, por suerte todos están bien.

No vuelvo ponerlos en ese peligro más.

Miro hacia arriba por inercia, visualizo como pequeñas luces pintan el oscuro cielo. Parpadeo varias veces tratando de ver con claridad, pero me doy cuenta que no es mi imaginación, en realidad sí hay estrellas en el cielo.

No hay personas transitando, no hay contaminación.

Entro a mi habitación en busca de mi fiel amiga, ya llevaba días sin usarla. La enciendo y apunto hacia un edificio en especial, se encuentra algo lejos, pero sé que allí vive Susan.

Para mi sorpresa al enfocar allí se logra ver el cielo y una que otra estrella.

Sé que cuando se lo muestre le encantará.

Tomo un par de fotos y bajo la cámara aun viendo hacia ese edificio.

Estamos tan lejanamente cerca linda.

Un suspiro deja mis labios. Cuanto quisiera verla, apreciar su sonrisa una vez más "en vivo", detallar con claridad sus ojitos, ver como con la luz parecen amarillos. Acariciar su frondoso cabello. Sentirla una vez más entre mis brazos.

Te extraño tanto bonita.

Veo por última vez ese edificio antes de entrar a mi habitación, el frío es feroz y lo último que quiero es una pulmonía.

Me siento sobre mi escritorio procesando todo una vez más. Miro el reloj, ya marca las 9:30.

Como si de magia se tratase escucho una melodía en mi celular y prácticamente corro hacia el como si mi vida dependiera de ello.

O quizás nuestra relación...

―Bonita ―hablo apenas descuelgo, ni siquiera leí de quién se trataba― ¿todo está bien? ―silencio― ¿linda?

―Ya le dije a mi papá ―frunzo el ceño confundido ¿qué le dijo? ― Jenifer me impulsó a hacerlo, me di cuenta que estaba siendo egoísta al ocultarle esa información tan severa.

Mi Amor En Tiempos De Cuarentena [Terminada 🧠] [Editada🧠]Where stories live. Discover now