YELLOW, BLUE & GREEN (COMPLETA)- Adaptación Juliantina

19

Valentina se despertó a la mañana siguiente con el sonido de "Twinkle twinkle little star" repitiéndose. Girándose, se frotó los ojos y examinó la habitación, viendo la pequeña figura de Juliana. La chica de ojos azules bostezó y se deslizó fuera de la cama, caminando y sentándose al lado de su novia.

Juliana saltó cuando se dio cuenta de que Valentina estaba despierta. Rápidamente movió sus manos lejos de las teclas y se frotó los ojos. Valentina se dio cuenta de inmediato de que algo andaba mal.

"¿Qué pasa?" Valentina preguntó con preocupación, buscando la mano de Juliana y entrelazando sus dedos. La chica más joven miró nerviosamente.

"Tuve una pesadilla," susurró Juliana, bajando su cabeza. Los ojos de Valentina se abrieron.

"Pensé que se habían ido", Le respondió en voz baja, alcanzando y ahuecando la mejilla de su novia.

"Yo también", Juliana suspiró.

"Despiértame la próxima vez, ¿de acuerdo?" Valentina pasó su pulgar por la mejilla de Juliana. Odiaba la idea de que Juliana despertara de una de sus pesadillas y estuviera sola. La pequeña niña asintió suavemente, pasando rápidamente hacia adelante y apoyando la cabeza en el hombro de Valentina.

"Si te hace sentir mejor, vamos a ir por tu regalo hoy," Valentina susurró antes de besar la frente de Juliana. La pequeña niña se quedó sin aliento, luchando por ponerse en pie.

"¿En este momento?" Juliana preguntó con los ojos muy abiertos. Valentina no pudo evitar sonreír.

"Tan pronto como estés lista," la chica de ojos azules lentamente se puso de pie.

Juliana agarró una muda de ropa y corrió al cuarto de baño para vestirse. Atontada, Valentina se cambió a un suéter grueso y pantalones.

Después de que las niñas comieran su desayuno y terminaron de prepararse, Juliana prácticamente arrastró a Valentina a su coche. A medida de que salieron a la calle, Juliana comenzó a interrogar a la niña mayor.

"¿A dónde vamos?" Juliana inclinó la cabeza hacia un lado, viendo como Valentina giraba en una dirección que nunca había conducido antes. La chica de ojos azules se echó a reír, sacudiendo la cabeza.

"No puedo decirte todavía, boba, eso arruinaría la sorpresa," Valentina levantó una ceja. Juliana puso mala cara.

"¿Puedo tener una pista?" La pequeña niña miró a Valentina con esperanza, sólo para gemir de frustración cuando Valentina negó con la cabeza.

"Paciencia", Valentina se rió. Juliana giró los ojos juguetonamente, conformándose apoyada contra la ventana y viendo cómo se movían más y más cerca a su destino.

La niña más pequeña se confundió más cuando Valentina se detuvo en un pequeño aparcamiento al lado de un edificio de ladrillo.

"Estamos aquí," Valentina sonrió, aparcando el coche y arrastrándose fuera del asiento del conductor. La chica de ojos azules giró a la parte trasera del coche, agarrando un soporte de plástico pequeño. Juliana lo estudió confundida.

"¿Qué es esto?", Preguntó Juliana, colocándose al lado de Valentina y apuntando al soporte.

"Ya verás," Valentina se rió. Juliana gimió, pero con ánimo pronto siguió a Valentina al interior del edificio.

"Cierra los ojos", la chica de ojos azules instruyó. Juliana levantó una ceja, pero decidió no cuestionar la petición de Valentina. Tan pronto como ella se tapó los ojos con las manos, sintió una pequeña mano en la espalda, conduciéndola.

Con cuidado, ella permitió que Valentina la condujera por lo que parecía ser un pasillo. Cuando dejaron de caminar, se mordió el labio.

"Abre los ojos", susurró Valentina, deslizándose junto a Juliana para ver su reacción. La pequeña niña dejó que sus manos cayeran a los costados, estudiando la habitación en frente de ella.