Concubina Mu: Una Flor, una Corona de Espinas y la Diosa Yara de la Armonía.

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Mu Qing sabía que su mejor aliado para llegar al meollo del asunto no era otro que su enemigo de antiguas generaciones; sabía que si no era capaz de cooperar con él jamás podría, por sus propios medios, averiguar la manera de acabar con el demonio HunLuan.

Para ser exactos no era que Mu Qing no confiará en sus propias habilidades. Tampoco se trataba de tener qué colgarse a las faldas de una Calamidad poderosísima para salvar el maldito trasero de su maldito novio.

Y sí, este era Mu Qing sabiendo que a pesar de todas las diferencias, a pesar de todos los malentendidos, y a pesar de todas las cosas que aún faltaban por aclarar, ellos eran una pareja consolidada.

En el transcurso de aquella semana, Mu Qing llegó a tres descubrimientos importantes.

El primero, la dimensión creada por el demonio HunLuan funcionaba en un espacio-tiempo reducido; de modo que su manifestación cronológica se percibía de forma diferente. De modo que, el año que habían compartido juntos, no era del todo real pero tampoco había sido un completo engaño. Para ellos el paso del tiempo había transcurrido de manera tan exacta que si hubiesen tomado un cuchillo para cortarse un dedo se hubieran desangrado a la misma velocidad que en su mundo de origen. Ahora que sabía sobre esto, siendo totalmente honesto, Mu Qing no sabía si sentir alivio o decepción.

Lo segundo que descubrió, fue que el palacio Xuan Zhen ya pertenecía prácticamente en organización y diligencia al palacio Nan Yang; al parecer había una persona más organizada que Mu Xian y esa persona era Ye Yuming. Escuchar sobre esta noticia generó en Mu Qing una absoluta disconformidad, pero en vista de los hechos, decidió que no era el mejor momento para recuperar poder sobre su palacio. Les permitiría a ambos segundos hacerse cargo de los palacios, como hasta ahora, mientras él se dedicaba a descubrir la manera de rescatar a Feng Xin. Además el hacerlo le ahorraba tener que explicar el porque ahora tenía disposición sobre el palacio Nan Yang.

Por último, había investigado que, el único registro conocido sobre este demonio HunLuan había sido encontrado y guardado en una biblioteca hacía poco menos de 200 años atrás.

Quizás uno pensaría que era bastante sencillo recuperar un pergamino del que pocas personas conocían. Básicamente nadie tendría la necesidad de robarlo o usarlo como moneda de cambio, pero lo cierto era que la vida nunca sería así de sencilla.

No para Mu Qing.

La explicación era mucho más que evidente. Ese registro, específicamente ese, había estado desde un inicio en la biblioteca personal de Lluvia Sangrienta que Encuentra una Flor. Honestamente al general del palacio Xuan Zhen no le importaba dónde lo había conseguido ni en qué circunstancias. Lo que verdaderamente importaba, era como lograr que se lo entregara.

En cuanto a esto, la cuestión podía ponerse incluso más turbia.

El hurto no estaba bajo consideración, no había manera de robarle nada al Rey de la Ciudad Fantasma sin que se diera cuenta. El pensamiento era estúpido de principio a fin, por lo tanto ni siquiera había pasado por su mente.

En cambio la idea de enfrentarse cara a cara con la pareja, al menos después de lo que había vivido durante las alucinaciones, se había convertido en fuente constante de ansiedad. Mu Qing ni siquiera estaba seguro de cómo podría ver a su alteza de ahora en adelante sin agregar otro lastre a las culpas.

Quizás, y esto jamás lo admitiría, fue por eso que huyó de Mansión Paraíso en medio de la noche sin dar aviso de haber recobrado la consciencia. Vaya sorpresa la de Mu Xian cuando, a la mañana siguiente, se encontró con el General del Palacio Xuan Zhen desayunando como de costumbre.

Desde entonces ambos habían estado estudiando la circunstancia con la ayuda de Ling Wen.

Desde su emprendimiento un pensamiento parecía haber germinado en su conciencia. Como una pequeña semilla al comienzo, la cual había echado raíces, recorriendo los intrínseco pasajes de su mente.

Concubina Mu Y Otros Cuentos.Where stories live. Discover now