|| U n o ||

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Sus labios se deslizaban entre ellos de manera apisonada. El rubio clavó su mirada sobre la joven de a penas 17 años con la que estaba compartiendo aquellos apasionados besos.

La joven soltó una suave carcajada que le dio a entender al rubio que su momento había llegado. La besó de nuevo. Tocando más de lo que debía tocar, dada la ebriedad de la muchacha. Todo iba conforme a su plan.

Tomo de la mano a aquella inocente niña y la llevó hacia su coche en un completo silencio que solo era roto por las carcajadas ebrias de ella. "¿A donde me llevas Zeke?" El rubio miró de reojo a la muchacha que le robaba el sueño desde el día que la conoció. Deseaba arrancarle el incómodo vestido que llevaba aquella noche y hacerle el amor como bestias. Porque eso era lo que es, una bestia.

Empujó a la joven al coche y tras abrocharle el cinturón, subió al asiento del conductor, preparando previamente un trapo con cloroformo. "¿Vamos a tu casa?" La muchacha clavó su mirada sobre el hombre quien con suavidad acercó la mano con el pañuelo hasta su nariz y lo mantuvo ahí hasta que la muchacha quedó inconsciente.

El hombre arregló sus gafas y apartó el paño a un lado al ver como la muchacha caía hacia el frente. Acaricio sus hombros desnudos y arrancó el coche. Miraba de reojo a la muchacha y luego miraba su demacrado reflejo en el espejo retrovisor. Al fin y al cabo él tenía 30 y ella 17. Relamió sus labios ansiando llegar a su morada para poderla tener al completo.

Freno el coche frente a una casa de campo vallada y bajó del coche tomando en brazos a la inocente joven. "Dulce e inocente __, no sabes en qué lío te has metido" Zeke esbozó una perversa sonrisa y acarició las piernas de la joven de manera lasciva. Se removió entre sus brazos. "Tengo sueño..."

Zeke suspiró con suavidad cuando los brazos de aquella inocente muchacha rodearon su cuello. El cloroformo no había funcionado, simplemente se había dormido.

Entró a la casa y dejó a la joven sobre su cama, aquella noche la haría suya no importaría el qué. Encadenó las frágiles muñecas de ella y se giró hacia su mesilla de noche buscando con rapidez en los cajones.

Tomo la cara de la muchacha y deslizo la droga entre sus labios entreabiertos. No opuso ninguna clase de resistencia y Zeke se limitó a esperar a que aquella droga despertara en la muchacha ganas de follar.

Ella comenzó a removerse en el sitio, visiblemente incomoda. Zeke se acercó de manera cautelosa a ella y acarició sus piernas de nuevo. La muchacha inocente, no tardó en suspirar por sus caricias pidiéndole más.

Zeke no dudó en complacer los deseos de la joven encadenada a su cama y esa noche ambos se entregaron al otro con pasión, hasta que el efecto de la droga pasó y la niña se desplomó a su lado, dormida. 

El rubio la observaba en silencio acariciando su silueta con las yemas de sus dedos, era una mujer hermosa y ahora seria solamente suya.

Enrolló en mantas a la niña y la desencadenó de la cama. Bajó al sótano y una vez allí dejó a la muchacha en un colchón tirado en el suelo, la volvió a encadenar y siguió esperando a que se despertara.

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Hacia tiempo que no escribía un capítulo tan corto, igualmente es la mar de intenso jsjsjs.

Es tan intenso que llevo escribiendo como cuatro días, viva la depre.

En fin, nueva historia wii.

Sayonara.

@yarue_delapleve_xd 💙☯️💙

||E s t o c o l m o||Where stories live. Discover now