Capitulo 32 (1/4)

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Con un pequeño paso hacia delante entramos en Snowdin, deje de flotar para sentir la nieve hundirse a causa de mis pisadas.

-Conoces todo el subsuelo, ¿verdad?- pregunta el rubio seriamente mientras entraba también al helado lugar, cerrando la puerta tras de sí.

-Mejor que nadie- contesto con una amplia sonrisa, amaba sentir la nieve bajo mis pies.

El chico me miró unos segundos en silencio, lleno de curiosidad.

-Sigamos nuestro camino, debo salir de aquí- dice serio, caminaba en silencio.

Le seguí también en silencio, el chico parecía ser experto en amargar un buen momento.

Luego de caminar un rato no muy largo llegamos hasta aquel puente donde siempre hacia acto de presencia mi queridísimo amigo esqueleto. Sonreí ligeramente mientras un pequeño sonrojo se asomaba por mis mejillas tímidamente.

El rubio se detuvo temeroso al sentir una presencia detrás, una presencia que llevaba tiempo sintiendo.

Sonreí para mi interior viendo al chico congelado en su sitio, respira hondo y se voltea para afrontar al peligro.

Sans dijo sus típicas frases y extendió su esquelética mano en la que se ocultaba aquel pequeño juguete capaz de hacer tal sonido cómico. Me moría de ansia por ver la reacción del rubio ante la inminente broma.

El joven miró fijamente la mano del esqueleto y desconfiado aceptó el saludo. El gracioso sonido no tardo en escucharse rompiendo el incómodo silencio que adornaba el ambiente.

Me reí a carcajadas acompañada de la risa del esqueleto que mostraba de manera burlona su mano al rubio. Gonzalo me miró sorprendido y luego a Sans, hizo lo mismo una vez más.

-¿Que?- Por la confusión no logro pronunciar otra palabra, poco a poco logre tranquilizar mi risa y tome una bocanada de aire.

-Solo fue una broma niño, siempre tienen gracia- responde Sans con su enorme sonrisa.

El joven chico desvía la mirada y luego suelta una pequeña y corta risa, casi inaudible.

-No ha estado mal- respondió sonriendo levemente.

Sonreí ante su reacción, aliviada de que no se lo haya tomado mal. Habría sido incomodo que se hubiera molesta por la pequeña broma del esqueleto.

-Soy Sans, Sans el esqueleto- se presenta de repente el sonriente esqueleto, el rubio le mira juzgándole con la mirada y sonríe leve.

-Yo soy Gonzalo- se presenta sonriendo levemente.

-Sans el esqueleto, es de fiar- comentó flotando al lado del esqueleto mientras sonreía.

El rubio se quedó en silencio, dudando si hablarme o ignorarme como con Toriel.

-¿Te está hablando _____?- La sorpresa se reflejó en el rostro del rubio y parpadeó varias veces.

-¿Cómo...?- el esqueleto le interrumpió.

-¿Lo sé?- Sans sigue su oración- Algunos la conocemos y otros no, seguramente ella te dirá- responde el esqueleto y asiento con la cabeza dándole la razón.

-Creo entender. Bueno, encantando de conocerte Sans, pero tengo que continuar.

El rubio al decir aquello se da media vuelta preparado para continuar su aventura, la seriedad y madurez de rubio dejaba un aura curiosa a su alrededor.

Tanto Sans como yo nos lo quedamos mirando en silencio, pero de repente el rubio se detiene y me mira a los ojos.

-¿Vienes ______? Me vendría bien tu ayuda- Me saca de mis pensamientos mientras sonríe levemente, vuelvo flotando a su lado y seguimos nuestro camino dejando atrás a Sans.

Alma fantasmal//Undertale, Sans x tu//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora