Otra vez no

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En la escuela todo era muy raro, la gente se quedaba mirándome extrañada y con gesto curioso, era muy incómodo, aunque sabía perfectamente a que se debían sus miradas. Después de la primera clase salí al pasillo, todo seguía igual si obviábamos el hecho de que la gente me miraba como si fuese rara, no sabía hacia donde ir así que me alegre cuando vi a mis compañeros, con los que había estado los primeros días situados donde de costumbre, me acerque y los salude con gesto tímido, ellos me respondieron y me preguntaron porque había faltado tantos días, yo les mentí diciendo que había estado mala ya que no tenía ganas de contar todo lo sucedido, vi como Craik se acercaba a nosotros y un sentimiento de culpa me invadió por lo sucedido en la cafetería de la escuela el primer día que vi a Dareck

-Craik tengo que hablar contigo-Dije mirándole apenada

-Ahora tengo clase, pero si quieres podemos hablar en el siguiente cambio-Me respondió indiferente, como si no hubiese pasado nada-Te esperare junto las taquillas

-Está bien-Dije sonriéndole

La clase de mates se me paso volando, ya que llevaba tiempo sin hacer nada y tenía muchas ganas, cuando salí al pasillo, busque a Craik con la mirada, él se encontraba al otro lado apoyado en una de las taquillas, me dirigí hacia el

-Ven, aquí no estaremos bajo la mirada de todos-Dijo arrastrándome de la mano hacia una sala deshabitada, era amplia y estaba llena de artículos de limpieza

-Oye Craik, quiero que sepas que me siento fatal por lo que sucedido en la cafetería, no he tenido oportunidad de disculparme pero quiero que sepas que…

-Eh, tranqui, no pasa nada, tu no tenías la culpa de nada, no debí acercarme tanto… no sabía que tú eras su pareja…

-Yo tampoco lo sabía-Dije riéndome nerviosa-Me entere ese mismo día, pero nada tiene excusa para lo que Dareck te hizo, no tenía motivos para hacerlo, solo quería que supieses que me sentí muy mal por lo que paso.

-Está bien, pero no quiero que te sientas culpable, además ya no tengo nada, soy fuerte como un toro-Dijo dándose porrazos con los puños en el pecho, haciéndome reír

-Si ya veo-Respondí entre risas-Pero nada cambia el hecho de que fue una injusticia

-Déjalo ya Daiana, estamos en paz-Dijo rodeándome con sus brazos para darme un suave abrazo, yo me dispuse a separarme justo cuando mi mirada se desvió hacia la puerta, desde la que unos enfurecidos ojos negros me miraban

Vi esa oscura mirada que me hacía estremecer, a veces de miedo y a veces de placer, aunque apostaría que esta vez estaba muy pero que muy enfadado, me miraba fijamente con los ojos negros como el carbón, el pelo desordenado, la mandíbula tensa y sus manos cerradas en puños. Me separe rápido de Craik y me interpuse entre él y Dareck

-¡Dareck!

-¿Interrumpo algo?-Dijo con tono seco y frio

-¿Qué?, claro que no, solo me estaba disculpando con Craik por lo que sucedió en…

-No me mientas-Dijo en voz alta haciendo que me sobresaltara-Tu… maldito-señalo a Craik y se fue acercando a el desafiante

-Eh colega, te está diciendo la verdad, no estábamos haciendo nada-Decía con las manos levantadas en son de paz. Me daba pena Craik…cuando Dareck se ponía así era muy atemorizante. Me interpuse ente ellos otra vez para que intentar tranquilizar a Dareck

Eh, mírame-Dije poniendo una mano en su mejilla y haciendo que bajara la mirada sanguinaria que tenía clavada en Craik-no te estoy mintiendo

-¿Le proteges? -Sentí la rabia con que Dareck pronuncio esas palabras, el me miraba con asco y no tenía motivos para ello.

My dominant wolfWhere stories live. Discover now