Un error para no olvidar. (Terminada)

Capitulo 27 - ¿Cómo dos caballos desbocados?

Mi estómago se contraía por mis nausear y vómitos, Natalia estaba a mi lado con cara preocupada, hacía ya dos días que me venía diciendo que tal vez mis vómitos continuos no tenían que ver con un virus sino con otra cosa llamado embarazo.

Limpie mis dientes en el lavabo y mire las lágrimas de mis ojos, no me pregunten porque, siempre que vomito lloro desconsoladamente, detesto vomitar, la sensación en el estómago como si se cerrara y luego explotara hacia el exterior me hace sentirme irritada y eso siempre (desde chica) desemboco en sollozos.

- ¿te vas a hacer el test Marie? – me dijo mi amiga, yo simplemente la mire con cara de odio, sabía perfectamente cómo me ponía ese tema.

Me negaba a creer que estaba embarazada. ¡Era imposible! Cada 3 meses iba religiosamente a mi ginecólogo y este me daba la inyección, aparte Matthew fue el único hombre con el que estuve y él se había cuidado en todas las veces. Bueno a decir verdad, hubo una vez que nos ganó el calor del momento, pero era tener mucha mala suerte que justo ese día que él justo no se cuida, a mi inyección se le ocurre dejar de funcionar. Aparte esa vez fue el fin de semana luego del cumpleaños de mi padre, hace más de 9 semanas de eso, no puede ser que haya estado embarazada 8 semanas sin darme cuenta, no puedo ser tan idiota.

No quiero ni pensar que pasaría si le tuviera que decir: "Ey Matt, bueno, estoy embarazada" , ya habíamos tenido una charla al respecto y su postura era bien clara, no quería saber nada con ser padre, igual que yo, que no quería saber nada con ser madre.

- Marie, no me ignores, tenes que hacerte el test, así podes tomar alguna decisión...

- No te ignoro Nati, solo que es al pedo hacerme un test, porque NO ESTOY EMBARAZADA – le dije yo más para tranquilizarme a mí misma que a ella.

- ¿Te das cuenta que si llegas a estar embarazada podes tener las mismas semanas que yo, casi 10?

- ¿Y?

- ¿Es joda?, si queres abortar deberías hacer todo ya, solo es legal hasta la semana 12, si te seguís haciendo la boluda con el tema y no te haces un test, después no vas a tener ninguna otra opción que tenerlo.

Sabía perfectamente que Natalia tenía razón, pero me daba muchísimo miedo hacerme esa maldita prueba y que el resultado fuese ese. Un embarazo no deseado, si a eso le agregamos el momento de mierda que estoy pasando con Mat, es una combinación para un coctel Molotov.

- Se nos hace tarde Nati, mejor vamos a vestirnos – le dije yo dando por finalizada la charla.

Era lunes o mejor dicho era EL LUNES. Me iba a encontrar con Matthew después de casi dos semanas y aún no había conseguido un cachorro, debería apurarme con ese trámite.

Tenía sentimientos encontrados por ver a Mat ¿Qué pasaría con mi cuerpo?, tendría la necesidad se sentirlo o tal vez luego de la experiencia de la otra noche con Fran iba a estar más calmado mi cuerpo cachondo; de todas formas mi cuerpo no era lo que más me preocupaba al verlo, me daba mucho miedo saber que era lo que iba a sentir mi corazón. ¿Podría perdonarlo? ¿Podríamos retomar todo tal cual estábamos antes de mi cumpleaños?

Mire mi atuendo frente al espejo de cuerpo entero que tenía en el cuarto. Decidí que era el conjunto adecuado para encontrarte con tu ex-amante que también resultaba ser tu jefe.

Ya en la oficina saludamos a todo el mundo con la mano, Nati se quedó en su puesto y yo seguí mi camino hacia la zona donde trabajábamos nosotros. Intente retrasar todo lo posible mi encuentro con Matthew, me pase gran parte de la mañana en la oficina de al lado donde estaba el departamento de Internacional y cabotaje, armando algunos maillings con los que íbamos a salir el viernes próximo.